jueves, 14 de julio de 2011

COLABORACION


Consejo nacional para
la costura en las tardes
Apolinar Castrejón Marino
Teniendo como precepto la frase que dice: «Ten cuidado con lo que deseas porque podría hacerse realidad», pensamos sugerir al gobierno la creación de un Consejo Nacional para la Costura en las Tardes, que satisfaga los deseos de «creatividad», adquisición de habilidades y autoempleo de las mujeres y jovencitas que se enrolan en «cursos» y «talleres» en dependencias, instituciones, organizaciones y hasta particulares.
Acudimos a visitar algunos centros de impartición de los mentados cursos, y en verdad nos encontramos con algunos muy «originales». Un grupo de 25 niños de entre 10 y 16 años se inscribieron por $ 200. °° a un curso de «manualidades», en donde aprenden cosas tan útiles como esta:
Al inicio de la «clase» pusieron carbón en un anafre y le prendieron fuego, sobre el fuego colocaron una cacerola para derretir parafina. Luego vertieron la parafina derretida en un molde de hojalata como de 40 centímetros de largo por 30 de ancho y 10 de altura.
Al verter la parafina, fueron colocando pequeños trozos de cordón de algodón separados 10 centímetros uno de otro. La parafina se solidificó en media ahora, y luego con una especie de corcholata grande (de botellón) fueron cortando círculos, procurando que en el centro de cada uno, estuviera un pedacito del cordón.
La lección de ese día fue particularmente productiva, porque cada alumna hizo 10 veladoras para piscina (¿?) a un costo de 15 pesos cada una…y varias quemadas. No es que seamos sangrones, pero ¿No se le hace una burla? Con todos los problemas que trae consigo la temporada de lluvias como encharcamientos, deslaves, inundaciones, goteras en los techos, reblandecimiento de las paredes, contaminación de los abastecimientos de agua, y párele de contar ¿Usted querría veladoras para piscina?
Papel picado, flores de migajón, tarjetería española, elaboración de moños ¿Es ese el nivel cultural y mental de nuestras mujercitas? Pintura de cerámica es un curso en el cual las damitas compran una figura de pasta, y el curso consiste en que le pongan pintura rosada en la cara, negra en el pelo y de colores surtidos en la ropa; y luego colocan en sus casas su «obra de arte» ¿Es esa la creatividad?
Ahora entendemos por qué muchas instituciones muy serias, de corte intelectual y educativo, han dejado de organizar conferencias, congresos, mesas redondas, simposios, coloquios y muchas otras actividades eminentemente culturales. Porque a la gente no le interesa, y se muestra más entusiasmada en aprender a hacer pulseritas, bufandas y bailar zumba.
¿Ha visto usted unos arreglos que hacen con «naturaleza muerta»? Con basura del campo como hijas y ramas secas hacen unos manojos atados con unos moños muy coquetos, compran unos floreros muy elegantes y caros y se llevan a su casa un adorno de casi cien pesos….que termina arronzado en el baño.
Por todo esto, caerían muy bien el Consejo que mencionamos, donde se impartiría principalmente Corte y Confesión, y así las damitas aprenderían a hacer sus blusitas, sus batas y mandiles, y al mismo tiempo tendrían tiempo para confesarse sus penas ¿O no?

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.