jueves, 7 de julio de 2011

COLUMNA

Panal de miel
Apolinar Castrejón Marino
Se entiende que las elecciones tienen como fin cambiar a los gobernantes y legisladores que han concluido su periodo de gracia, pero las realizadas el domingo 3 de julio en Coahuila, Hidalgo, Nayarit y el Estado de México tienen el efecto de estarnos develándose importantes misterios de la política nacional.
Bueno, la verdad es que ya sabíamos todo, y solo faltaba que ellos mismos lo dijeran. Como la «maestra» Elba Esther, que muy ensoberbecida del triunfo de sus corifeos, creyó que podría placearse y dar rienda suelta a su lengua viperina…impunemente.
Descobijó al mismo Felipe Calderón, diciendo que no tiene las manos limpias, pues con el hizo importantes y asquerosas negociaciones según las cuales, ella lo apoyaría para que llegara a la presidencia de México, y él a su vez le concedería los puestos que ella le pidiera.
De su boca de reptil salieron estas confesiones, sin que mediara tortura ni presión alguna. Ni Calderón, ni nadie de la Oficina de la Presidencia salieron a desmentir ni a contradecir lo dicho por la Gordillo. Y ella muy contenta de comprobar el miedo que le tienen. Pero «donde menos se espera, salta la liebre», y un aludido por la «maestra», le reviró algunos asuntitos que le tenía guardados para una ocasión como esta.
Miguel Ángel Yunes anduvo lloriqueando que le agandallaron la Gubernatura del Estado de Veracruz las malas artes del PRI y la operación dirigida por el gober saliente Fidel Herrera (El Tío «Fide»). Hace un año, el 4 de julio de 2010, Yunes compitió por la gubernatura bajo las siglas del PAN, y fue derrotado por Javier Duarte del PRI.
Nadie se conmovió de los pataleos, lloriqueos y pucheros de Yunes, pues había sido un priísta de toda la vida, y además estaba asociado a la lideresa que tiene nombre de corrupta Elba Esther. Es más, la gente se preguntaba que cómo le andaba rascando a su suerte dentro de una jaula de leones.
Y ahora resulta que sabiéndole sus cositas a la maestra, se las guardo en el buche. Y es hasta a hora que se ocurre contarnos que la maestra le pidió que se mochara con varios millones para mantener a su partido político familiar, y más otro pico de milloncitos para cada campaña política a realizarse.
Como la desvergüenza es una característica genética de los políticos, no abundaremos mucho en este asunto. Solo queremos advertir al respetable, que eso que confiesan impúdicamente de Veracruz, del ISSSTE y de la Presidencia, seguramente está sucediendo en este preciso momento en nuestra entidad.
Hoy nos queda muy claro que ese partido conocido como El Panal, es muy codiciado por la miel que destila a sus militantes y «agremiados». Lo malo que esa miel es el producto de nuestro trabajo y nuestros impuestos, y es un gran caudal de dinero que sirve para mantener a «maestros» parásitos metidos a políticos, a prófugos del gis, y a engendros de la corrupción.
Ahora nos explicamos que docenas de «candidatos» del panal que pierden las elecciones de sus municipios y distritos, andan luego como si hubieran ganado las elecciones. O a Presidentes Municipales y legisladores del Panal que han sido destituidos o inhabilitados por no comprobar su cuenta pública, anden como si nada. Si están perfectamente abrigados por el manto de la corrupción. O usted ¿Qué dice?

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