COLUMNA

Falconario

Jorge Falcón

EL IGATIPAM-GUERRERO, CONFUSA E INEFICIENTE EN COSTA GRANDE.

Una decena de hombres y mujeres de la tercera edad de esta cabecera cafetalera de Atoyac de Álvarez, se quejan amargamente de la infuncionabilidad e ineficiente operatividad que posee la dirección general del Instituto Guerrerense para la Atención Integral de las Personas Adultas Mayores (Igatipam), ante la comunidad senecta.

Precisan los entrevistados que «para tener acceso a los servicios que presenta esta oficina, les exigen extracción de sangre»; misma operación criminal a la que se oponen los señores de edad respetable y avanzada. Esto debido a la ineficiente operatividad que ha mostrado su titular Alejandro Arcos Catalán, quien responde al mismo perfil que demostró cuando se desempeñó como titular de Catastro en la comuna chilpancinguense.

El pesar de los ancianos, señalan «es que ni somos atendidos de manera decente; como tampoco se nos da la orientación debida por parte de ninguna representación de esa oficina del Igatipam», precisan. A esta queja debe sumarse las esgrimidas en lugares como la costa chica, La Montaña y Tierra Caliente, donde la prensa ya ha dado muestra de la inoperatividad a favor de los hombres y mujeres de la tercera edad.