COLUMNA

Memorándum

Gerardo Ruano Cástulo

TOLEDO; FACTOR DE UNIDAD.

 

El empresario capitalino Víctor Manuel Martínez Toledo es un político que ha crecido. La prueba más elocuente de ello, es que hoy, precisamente hoy, que muchos andan destapados en busca de las candidaturas que estarán en juego en los meses siguientes, él aparece trabajando a favor de un proyecto unificador. En algo constructivo para la causa de su partido.

Así es. No hay duda, que por la trayectoria política, administrativa y empresarial que posee es uno de los activos más valiosos del PRI, que por lo mismo debe estar considerado siempre como un aspirante natural a la alcaldía de Chilpancingo o por cualquiera de los dos distritos locales, en donde tiene un posicionamiento aceptable. Pero lo más interesante de esto, es que mostrando madurez y que ha crecido como político, no anda desbocado en una aventura política. Parece tener bien clara la importancia, después de lo acontecido en enero, que tiene el construir un proyecto basado en la unidad y en la suma de voluntades.

Martínez Toledo, antes que pensar en las candidaturas, se ha avocado a la construcción de acuerdos y en la suma a favor de su partido. Se ha visto en la relación que ha fortalecido con el diputado federal Mario Moreno Arcos, con el que, al parecer, le interesa hacer equipo. No por una simple conveniencia coyuntural, sino porque sabe que el reagrupamiento de los diferentes actores políticos le darán mayor fuerza al PRI para enfrentar los retos del 2012, en donde si bien Enrique Peña Nieto es sinónimo de buena taquilla, no se deben dejar espacios para la excesiva confianza.

También se ha visto la mano del empresario en la conformación del denominado «Grupo SUR», el que si bien comenzó en Chilpancingo, ya se extiende por otras partes del estado. La suma de diferentes liderazgos en esa nueva agrupación, envía un mensaje claro de que en el PRI existen políticos que están enfocando esfuerzos para construir un proyecto fuerte basado en la unidad.

La apuesta de Martínez Toledo no parece estar depositada en un simple proyecto personal. Su visión parece ir más allá. En comenzar a construir, no solamente la recuperación del PRI en las elecciones del próximo año, sino en el fortalecimiento del mismo, con una proyección que alcance al año 2015, en donde el partido tricolor pueda estar en condiciones de ir con todo por la Gubernatura.

Por eso, no anda declarando o gritando que quiere ser alcalde o diputado local. Su atención parece estar depositada en la construcción de un proyecto sólido. Lo cual, siendo sinceros, le pudiera ser más redituable al final de cuentas, ya que una de las mejores formas de acceder a alguna posición política, es no teniendo diferencias con los demás actores políticos, y más aún, cuando se es factor de unidad.

En ese sentido, no habría que descartar la posibilidad de que Víctor Manuel Martínez Toledo sea proyectado hacia una de las candidaturas que estarán en juego en los meses próximos. Y todo en función, del trabajo serio y maduro que viene realizando. Al PRI, por donde se vea, le conviene tener candidatos que trabajen por la unidad. Que no anden sembrando discordia entre los habitantes de las colonias y comunidades. Y el empresario, hay que decirlo, hoy luce como ese factor unificador. Esa es la cuestión.

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