COLUMNA

El Alacrán

¿EN DONDE ESTA DIOS?

Pa su mecha, en ocasiones me las veo muy duraznos, mi ceguera esta pasando al otro oclayo (ojo) esta nube estaba en el izquierdo y ahora la desgraciada nube se trasporta al ojo derecho, espero no se pase al tercer ojo, y no me refiero al de la frente,
si no al que esta atrás, imagínese este ojo, ciego, y cerrado, que santa chinga tendré para cagar, mi estómago se llenara de alimentos mis intestinos de materia fecal y al mes andaré como mujer embarazada, parecida a las hormigas chicatanas panzonas, panzonas. Pero me encomendaré ante Dios, que por mas que lo busco no lo encuentro, la otra ves ví a una señora con un escapulario, gigante, en el pecho y me dije, esta señora ha de estar bien parada con el Padre Celestial, trae su credencial a la vista. Seño, Seño, ¿en dónde encontraré a Dio? Adentro del templo pásale, y reza con fervor, y ahí lo verás. Uy jefa, ya lo hice y no me contestó, concéntrate y pídeselo con amor, voy a entrar, a ver si tengo suerte, me senté en la banca y agaché los cuernos, y cuando estaba comenzando a verlo, y en ese momento escuché la voz de la señora sentado no hincado y de rodillas me comencé a concentrar y cuando ya lo tenía en la mira, sentí un bello perfume en mis nariz, álcela vista y era el ¡DIABLO! una Mujer con unas nalgas de Ninfa del olimpo paraditas, paraditas y con una cinturita de Princesa parecida a la de la Barby, unas piernas de mesa de billar, y una cara Angelical, en eso sentí un bastonazo en la cabeza y unas palabras que me decía ¡CONCENTRESE! Uy Abuelita con tantos Diablos (Mujeres) en la Iglesia que me voy a concentrar, te recomiendo a que asistas un domingo al templo. No se manche, mi cabecita de algodón los Domingos asisten muchos Diablos, con vestidos muy pegaditos, y pequeños y con un perfume muy provocativo de la marca hazme el Amor, y en el pecho escotado casi saliéndose los senos un Cristo Grande muy grande viniéndose en mi pensamiento ¿ Cual será Dimas y cual será Gestas? ¡ZAPE! otro bastonazo. Estas ante Dios, pues no lo veo, cómo es posible que un Demonio vea a Dios, será mejor que salgas de la Iglesia, me encaminé a la puerta. Y pensé, tengo que encontrar a Dios. No se pierda mañana el desenlace de ¿Dónde esta Dios?
 Los Quiere Cecilio

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