PRIMERA PLANA

Ofrecen recompensa para saber

quien filtró chayolista  de la DGCS 

Tras la publicación de una lista de más de 400 nombres de personas y empresas periodísticas, el titular de la Dirección General de Comunicación Social, Pedro Julio Valdez Vilchis llamó a reunión urgente a su personal para regañarlos por el descuido, además uno de ellos ofreció a comunicadores una recompensa para revelar quien fue la persona que filtró a La Crónica, Vespertino de Chilpancingo ese documento oficial administrativo.

Según el pasado miércoles como a las 14 horas, habría llamado a una reunión con carácter de urgente a sus colaboradores para conocer la versión y saber quien habría sido el responsable de la filtración, para ello no quedó solamente en eso, sino los regañó a todos parejo.

En tanto el subdirector de información de la Dirección General de Comunicación Social, José Nava Mosso, ofreció a periodistas una «Recompensa» para que ayuden a identificar al responsable de la filtración, pero nunca reveló el monto.

Anteriormente habían sucedido otras cosas en contra de la dependencia estatal, encargada de cuidar la imagen del gobernador del estado, el perredista Angel Heladio Aguirre Rivero.

Bajo el lema de «ladrón que roba a ladrón…» periodistas y directivos de la Dirección General de Comunicación Social (DGCS) se «jalonean» un presupuesto autorizado por el gobernador perredista Angel Heladio Aguirre Rivero para que difundan sus actividades pero que se ha convertido en la manzana de la discordia.

Tan solo la semana pasada sucedieron hechos vergonzosos cuando los periodistas tuvieron que tomar las instalaciones de la DGCS en protesta de que el pago que reciben mensualmente no se les había liberado.

Más aún tenían la certeza de que ese recurso es «jineteado» por el mismo titular Valdez Vilchis por medio de su delegado Arturo Morales García, pues en las cantidades incluso que se dieron a conocer en este vespertino, no corresponden de lo que reciben con lo que aparece en la nómina oficial.

Esta caótica situación no fue manejada correctamente por el personal de la oficina de prensa, se soltaron los rumores que se hicieron verdad de que los miles y miles de pesos eran embolsados por los directivos y apenas unas migajas aventaban a los periodistas que desesperados se abarrotan en espera de que les paguen, por lo menos puntual.

Este fue «la gota que derramó el vaso» pues los periodistas provenientes de Acapulco, Iguala, La Montaña, Tierra Caliente y Chilpancingo son citados para recibir el pago correspondiente, sin embargo los hacen esperar días lo que les molesta y hace que se organicen para protestar.

Sin embargo, el asunto no es que los periodistas se manifiesten, sino que hay gente incrustada en los medios y que se dedican a todo, menos a periodistas.

Hay albañiles, maestros, doctores, ojalateros, voceadores, inclusive algunos se autoproclaman «líderes» para reclamar el embute que han osado ir a patear la puerta de Casa Guerrero para que le paguen como periodista.

Lo grave de todo esto es que el gobierno ha tolerado todos estos actos vandálicos, hay muchos estafadores que se han metido a «periodistas» pues para esta actividad no se requiere de otra cosa que comprar una libreta, una cámara e ir y anotarse para que les paguen en la DGCS sin siquiera trabajar para un medio.

Ante las irregularidades financieras, los periodistas que si trabajan en medios de comunicación aunque modestos, pidieron una auditoría a la DGCS para que se ventile con transparencia cuánto en realidad les están autorizando, pues reciben una bicoca y en los recibos que firman aparecen con cantidades extravagantes.