Imparable ambulantaje
en todo Chilpancingo
Domingo Francisco Reyes.-La vendimia se ha enseñoreado en el primer cuadro del zócalo, conocido como «Primer Congreso de Anáhuac», además de extenderse a las arterias que comunican con las colonias adyacentes, en donde las autoridades de Gobernación y al parecer del mismo alcalde priísta Mario Moreno Arcos han cerrado los ojos a esta realidad.
La semana pasada, La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, dio a conocer esta explosión de puestos y negocios de venta de alimentos, ropa y «chacharitas» en la ciudad capital, ante la complacencia del director de Gobernación municipal, Inocente Mojica Peña así la complacencia y el «pago de factura» del presidente municipal Mario Moreno Arcos.
Al parecer, los compromisos establecidos con este sector del comercio informal se mantiene, pese a que no han buscado ambos funcionarios una solución a este problema, que se ha extendido sobremanera.
Las calles y andadores de Chilpancingo, así como en sus avenidas se ha saturado de trabajadores de la economía informal, que este renglón está controlado por líderes y lideresas, como es el caso de María del Consuelo Urióstegui que empezó fuerte con la instalación de varios puestos de «gorditas» o memelitas.
Amén de otros líderes que lograron colocar a «sus» trabajadores de este comercio informal en anteriores administraciones, todas priístas, pero que supieron negociar esta proliferación.
A la llegada del alcalde priísta Mario Moreno Arcos y su pago de facturas, este comercio informal se ha intensificado, sin que hasta el momento se sepa del plan de trabajo del nuevo director de Gobernación municipal, Inocente Mojica Peña, un dirigente de transportistas metido con calzador en esa área, esperándose un resultado que sea de beneficio al peatón y a la ciudadanía en general.
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