COLUMNA

El Alacrán 

¡YA CUALQUIER PENDEJA INSTALA SU TRAGADERO!

 Como la ve, si es cuadrada, ya las almizcleras, colocan su puesto de comida insípida sin ningún condimento, igualito como burro comiendo restrojo sin sabor y sobre todo la salsa, estos bizcochos meten a la licuadora los chiles, el pitómate, y un diente de dentista (ajo) y a la mendiga aguanta huevonas (la licuadora) y en unos dos minutos esta la salsa sin sabor olvidándoseles a estas pendejas la sal. Imagínese usted una chuletita de diputado (marrano) unos deliciosos frijoles refritos, y su salsa que la preparan con un montón de chile, que al probarla le quita el sabor a la chuletita  que no sabe usted si de seguir, mordisqueando al Diputado,

o entrarle de lleno al chesco, por lo picosos que esta esa puta salsa mal echa, No cabe duda que las cocineras de antes «ASABAN» los chiles junto con los pitomates, y al dichosos ¡MOLCAJETE! Que delicia de salsa y si era verde se asaban los entierros (Chiles) el tomate verde su diente de ajo y una buena rama de culantro (cilantro) y al cajete como dice la indiada. Las marranas cocineras comienzan a despachar su basura de comida a eso de las 9 a.m. La cocineras de antes se levantaban muy temprano a las 5.00 a.m. a preparar su comida, para que estuviera preparada a las 7.00 a.m  y así agarrar al empleado que entra a su trabajo de mañana. Pero si usted acude al Mercado cualquiera que sea estas comienzan a despachar su dolor de estomago a las 10.00 a.m. y ahí empieza la variedad todas como guacamayazo empiezan a gritar ¡PASELE! tenemos mole, pescado, albóndiga con patas, carne de cuchi en salsa verde, caldo de pollo y lo asedian con sus gritos invitándolo a sentarse en su mesa y no es solamente una son como 5 cotorras que quisieran jalarlo y sentarlo en su mesa a huevo. Total si ve que la mozuela (mesera) tiene buenas nalgas acepta, y se sienta pidiendo diputado (Cerdo) en salsa verde, ¿Qué refresco o agua?  tenemos de jamaica con hielo, Jamaica sin hiele y Jamaica al tiempo. Le sirve su Cerdo acompañado de frijoles, y arroz, y a un lado en un chiquihuite unas tortillas de mano y a entrarle, esta disfrutando su cerdo y en esos momentos por la mesa circula una ¡CUCARACHA! No le queda otra que espantarla, o hacerse el disimulado, por que aun que usted no lo crea todas las cocinas de todos los mercados, están infestadas de ¡CUCARACHAS!  acompañadas de Ratas. Que Mercado del Mundo ¡NO! tiene Cucarachas y ratas.

Los Quiere Cecilio.