PRIMERA PLANA

Hay renuncias y amenazas

de Alcaraz  contra regidores 

 TIXTLA, GRO.—Después de cumplirse los primeros 100 días del gobierno municipal encabezado por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), comenzaron las renuncias y la inconformidad  de 5 de ocho regidores por la forma de gobernar por el edil Gustavo Alcaraz Abarca.

La Crónica, Vespertino de Chilpancingo conoció que quien manda y toma decisiones en el Ayuntamiento tixtleco, es el «junior»,  Gustavo Alcaraz Guerrero, quien prácticamente obligó a renunciar a la tesorería Rolando Flores Loranca, al inconformarse de expedir cheques de alta nominación a su favor del hijo del alcalde, quien llegó de empleado de la secretaría de Educación Guerrero con un salario de 12 mil pesos.

Después de que renunció, el mismo edil Alcaraz Abarca, busca imponer nuevo tesorero a su incondicional Gilberto Basilio, sin embargo tiene la oposición de cinco de ocho regidores y del propio síndico,  en tanto los otros tres le aprueban todo lo que les presentan.

Los 5 regidores y síndicos, no se presentaron a la sesión del martes 15 y miércoles 16, ante esto, el mismo alcalde perredista Gustavo Alcaraz Abarca, los habría amenazado porque no le están cumpliendo con un capricho. 

El síndico David Martínez Valadez, junto con los regidores  que están en contra de las pésimas decisiones del presidente municipal, se encuentra Francisco Morales Gutiérrez, del PRI; Gabriel Iglesias Flores, PRD; Alberto Cantor Vázquez, Panal; Carlos Ramírez Felipe, Verde Ecologista de México; Víctor Bartolo de la Cruz, PT.

Los regidores Érica Alcaraz Sosa, del PRD; María de Jesús Blanco, del Partido Naranja y Vicente Pataleón Guerrero,  PAN,  quienes aprueban todas las anomalías del alcalde Gustavo Alcaraz Guerrero, y se presume que fueron sobornados con cierta cantidad de dinero para tolerar  los actos del «Junior», quien autoriza lo que se va ser dentro del ayuntamiento de Tixtla.

Adelantaron los representantes populares, que acudirán a la Agencia del Ministerio Público del Fuero Común, para dejar antecedente por si algo les llegara a pasar junto con sus familiares, luego que fueran  amenazados vía telefónica por el alcalde, Gustavo Alcaraz Abarca, por no acceder a sus caprichos y la propuesta del próximo tesorero municipal,  que lo apoya  el hijo del alcalde perredista.