COLUMNA

El Grillito Sin Censura

Alfonso Cerdenares Domínguez

—¿Fin del conflicto magisterial?; ¡¡¡nosotros lo dudamos!!!.—Nunca estaremos de acuerdo es en la actitud de unos cuantos.—Vislumbramos que hasta aquí llegó la carrera política de Figueroa Smutny.

¿FIN DEL CONFLICTO MAGISTERIAL?; ¡¡¡NOSOTROS LO DUDAMOS!!!; Cuando usted, amable lector esté leyendo estas líneas, ya se sabrá la decisión de los diputados locales, en el sentido de la aprobación o no a la Ley Estatal de Educación que, como ya todos sabemos, por segunda ocasión se trata en el pleno del Congreso del Estado; lo que llama la atención es la aglutinación de fuerzas federales en nuestra pequeña ciudad, líder del sablazo, el pozole y el mezcal, máxime tratándose de un día jueves pozolero; al parecer, al gobierno federal le importa más «persuadir» a los manifestantes,

a los maestros, a los trabajadores de la educación, a los padres de familia, que están inconformes con las Reformas Estructurales, que luchar contra todo tipo de violencia que se ha enseñoreado, no solamente en Guerrero, sino en todo el país; esto nos recuerda los albores del 2 de octubre de 1968, cuando el ser estudiante universitario, esencialmente de la UNAM, prácticamente era un delito; recordemos el caso de San Miguel Canoa, donde el cura incita a la gente para linchar a un grupo de trabajadores de la Universidad Autónoma de Puebla, acusándolos de «rojillos», comunistas y de otras lindezas; ahora, ser profesor, maestro o simplemente trabajador de la educación, significa estar en la mira de las fuerzas federales; muchas veces, nosotros cerramos nuestro cerebro a la lógica, al sentido común, cuando no comprendemos el por qué todo ese despliegue de fuerzas policiacas para tratar de impedir una marcha de protesta; ¿acaso los policías no son trabajadores asalariados?, ¡¡¡Claro que sí!!!, pero como dijeran algunos: «Es su chamba y hay que respetarlos»; en lo que sí NUNCA ESTAREMOS DE ACUERDO ES EN LA ACTITUD DE UNOS CUANTOS que se prestan al juego del Estado, como el caso ocurrido en el Cendi No. 4 «Octavio Paz», donde una veintena de padres de familia cometieron el delito de daños en propiedad ajena, al parecer, con el consentimiento de la directiva en turno; en esa institución, varios padres de familia rompieron las cadenas y candados con la intención de que los maestros, que se declararon en paro, vayan a trabajar; en este caso, seguramente la SEG hará mutis y no procederá jurídicamente en contra de los allanadores que, si se aplicara la ley sin cortapisas, tendrían que comparecer ante la Agencia del Ministerio Público; a esa gente se le olvida que la lucha ya no solamente es magisterial, sino que se ha convertido en una lucha social que debiera de involucrarnos a todos; ahora mal, la actitud de los legisladores priístas es una clara señal que responden a los intereses, no de los guerrerenses, sino de Enrique Peña Nieto y sus secuaces; ¿no que el poder legislativo es autónomo?, pues entonces, que ejerzan ese derecho y decidan con quién están, lo que sí VISLUMBRAMOS QUE HASTA AQUÍ LLEGÓ LA CARRERA POLÍTICA DE FIGUEROA SMUTNY, quien en su cuenta de Facebook ha estado despotricando en contra de la lucha social; «Cuando el PRD presenté su nueva propuesta de reforma educativa al pleno de la 60 legislatura, yo voy a votar en contra. Mi voto será en ese sentido porque su propuesta es anticonstitucional. En el PRI apoyamos la gratuidad de la educación, el respeto absoluto a los derechos laborales de los maestros de guerrero y una educación de calidad para los niños y jóvenes guerrerenses» (sic); lo peor de todo es que este señor no ha hecho una propuesta acorde que dé solución al conflicto magisterial y… ¿quién es el que anda ahí? Comentarios y sugerencias al E-Mail: alfcerdenaresd@hotmail.com