jueves, 16 de mayo de 2013

PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA


Agreden policías a 4 
periodistas, denuncian

 Camila Monserrat.—En lo que va de esta semana, elementos de seguridad pública han agredido física y verbalmente a al menos cuatro periodistas; la clara intención es coartar la libertad de expresión, según han manifestado las víctimas.

En dos días consecutivos se registraron en hechos distintos, cuatro agresiones contra comunicadores del estado de Guerrero, el primero se cometió contra un reportero de  Acapulco; otros dos se cometieron por policías municipales del municipio de Tlapa de Comonfort, en la región de la Montaña; mientras que el caso reciente se presentó en esta ciudad capital por un elemento federal.
La primera agresión se cometió el martes de esta semana contra el corresponsal en Tlapa  de Comonfort del periódico El Sur, Sergio Ferrer, cuando éste intentaba cubrir el ataque cometido por elementos de la policía municipal de dicho municipio, contra maestros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG).
Según se informó, el incidente se suscitó cuando una comisión de profesores de la Montaña acudió al palacio municipal de Tlapa de Comonfort para tener una audiencia con el alcalde petista Victoriano Wences Real, para exigirle que no realizara el festejo y que mejor destinara el recurso que se gastaría para las mejoras de las escuelas del municipio que presentan carencias.
Mientras tanto afuera se encontraban maestras y maestros que esperaban la salida de la comisión, ellos también exigieron al personal del ayuntamiento que se dejara de repartir los boletos que se rifarían como parte del festejo del Día del Maestro, en ese momento  los uniformados empuraron a los manifestantes con lo que se inició el zafarrancho.
Segundos después los policías comenzaron a agredir a los maestros, con empujones y jaloneos durante algunos minutos, entre los maestros y policías quedó Sergio Ferrer, quien se disponía a tomar fotografías como parte de su trabajo, y de pronto, de manera sorpresiva un policía encapuchado  le dieron tres golpes con un tolete.
En el mismo incidente se encontraba el corresponsal de periódico La Jornada, tomando imágenes de lo que acontecía, lo que molestó a los policías, quienes con palabras altisonantes amenazaron al reportero.
La otra agresión fue contra el corresponsal de Proceso, Ezequiel Flores Contreras, quien tuvo un altercado con el policía judicial federal Antonio Huerta Medina, quien es el guardia de seguridad del Juzgado séptimo de distrito, con sede en esta ciudad capital.
El incidente se suscitó cuando el corresponsal junto con el fotógrafo José Luis de la Cruz, intentaron realizar su labor periodística desde las inmediaciones de Juzgado, donde se presentó el líder magisterial Gonzalo Juárez Ocampo y Minervino Moran Hernández, quienes acudieron por su amparo contra las órdenes de aprehensión giradas por el gobierno estatal.
Al momento de que los dirigentes ingresaban al Juzgado, el reportero gráfico intentó  tomar fotografías, en ese instante el elemento federal pidió que no realizara su trabajo argumentando que no se podía tomar fotos al edificio y menos a la gente que acudía al lugar.
Luego se acercó hasta donde se encontraba José Luis de la Cruz, para tapar con la mano la cámara que utilizaba, acción que molestó a Ezequiel Flores Contreras, quien pidió al uniformado que permitiera realizar el trabajo de su compañero, sin embargo, el policía hizo caso omiso a la petición del corresponsal, lo que provocó un enfrentamiento.
Y es que el policía federal una vez más obstruyó el trabajo del fotógrafo, por lo que Ezequiel Flores Contreras tomó el brazo izquierdo del uniformado para que no siguiera tapando la cámara de su compañero, la acción inmediata del uniformado fue lanzar un golpe al reportero, agresión que fue replicada por el agraviado.
Cerca del lugar se encontraban más reporteros y al percatarse del conflicto se acercaron al lugar, y aunque no intervinieron no se salvaron de la agresión verbal que lanzó el federal, llamándolos «muertos de hambre».
Posteriormente, el policía pidió policías estatales, que también se encontraban en el lugar, que llamaran a los policías municipales para que se llevaran a la barandillas a Ezequiel Flores Contreras; y mientras esperaban la presencia de los preventivos, el federal «amenazó» al agraviado diciéndole «hijo de tu puta madre, solo porque vienes con tus pinches amigos de la camarita», relató el corresponsal.
Minutos más tarde llegaron los elementos municipales, sin embargo, Ezequiel Flores Contreras dijo que si lo detenían a él, también tenían que detener al federal por ser el agresor y que el conflicto se resolviera ante las autoridades competentes.
El uniformado se rehusó a ser trasladado a la barandilla, por lo que los municipales se retiraron del lugar sin realizar la detención.
Ezequiel Flores Contreras advirtió que por lo sucedido interpondrá una queja ante la Comisión de Defensa de los Derechos Humanos en Guerrero (Coddehum) y ante organismos no gubernamentales defensores de derechos humanos, para que «quede un antecedente de lo que me sucedió».
Cabe recordar que la madrugada del domingo, el fotógrafo y reportero Bernandino Hernández fue agredido en Acapulco por policías federales, además de ser golpearlo lo despojaron de seis mil pesos; estos hechos son un claro ejemplo de la intención de coartar la libertad de expresión en Guerrero, según se denunció. (API).

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