martes, 8 de octubre de 2013

COLUMNA

Cosmos

Héctor Contreras Organista

Un grupo de maestros nos han hecho llegar –mucho agradecemos su confianza- copia de un escrito dirigido al señor profesor David Torrecillas Mendoza, supervisor de la Zona Escolar 057 de Telesecundaria, quien a su vez, al parecer, tiene que ponerse de acuerdo con las autoridades de la Secretaría de Educación Pública de Guerrero, a fin de dar inmediata solución al grave problema por el que atraviesan los profesores de la Sierra de Guerrero.

Son tiempos y épocas muy singulares las que está viviendo este mundo y por lo tanto las autoridades deben poner a contribución la mejor de sus decisiones para, por un lado, cumplir con su obligación de educar, pero, por otro, no a costa de poner en riesgo la seguridad  ni la vida de los maestros.
C. Profesor David Torrecillas Mendoza
Supervisor Escolar de Telesecundaria
Zona 057
Chilpancingo, Guerrero.
Con el debido respeto que nos merece su alta investidura, los abajo firmantes del presente documento nos dirigimos a usted a fin de plantearle la penosa situación a la que nos hemos estado enfrentando tanto en los lugares donde trabajamos como maestros de Telesecundaria así como de manera especial cuando realizamos el traslado a cada población a la que servimos como profesores, con riesgo de nuestras vidas, debido a la creciente y lamentable situación de inseguridad que desde hace tiempo prevalece en todos lados, pero especialmente, en nuestro caso, en los pueblos de la región de la Sierra de Guerrero, donde se ubican las escuelas en que laboramos.
A la fecha, como es de su considerado conocimiento, no habíamos acudido a usted como nuestro superior en jefe, Supervisor de la Zona Escolar de Telesecundaria 057, a la que servimos con ética y responsabilidad y que a usted consta, porque con entereza esperamos, hasta donde nos fue posible, alguna instrucción de parte suya o de la superioridad de nuestras autoridades educativas a fin de encontrar y coincidir con algunas alternativas de solución para seguir prestando nuestros servicios educativos como lo hemos hecho hasta la fecha, pero sin exponer nuestra integridad personal.
Sin embargo, la realidad a la que nos enfrentamos en la región en la trabajamos, la podemos calificar de alto riesgo para nuestra seguridad ya que, en efecto, debido al clima de violencia que priva en la zona, nuestras vidas están en peligro, tanto en cada comunidad en la que desempeñamos nuestro quehacer como en el traslado –ida y vuelta- que realizamos cada semana.
Por tal motivo, los abajo firmantes, maestros que integramos esta zona, hemos unido nuestra decisión a fin de que usted nos pueda ofrecer algunas alternativas de solución para no incurrir en ninguna falta administrativa como tampoco ofrecernos como parte de las posibles víctimas que desgraciadamente día a día se están sumando en la región de referencia.
Profesor David Torrecillas Mendoza, solicitamos muy respetuosamente de usted su apoyo absoluto en el sentido que de ser posible asuma una respuesta inmediata que no afecte el sistema educativo de nuestro estado, al que servimos con lealtad y patriotismo, y que tampoco, obligados por nuestra misión de educar siga afectando la preocupación en nuestras familias como el riesgo que cada uno de nosotros asume en lo personal al ir a nuestro trabajo y de pronto encontrarnos en medio de la violencia.
En espera de su amable y considerada respuesta, nos suscribimos, como siempre, a sus respetables ordenes.
Chilpancingo, Guerrero, a 7 de octubre de 2013.
(Siguen firmas ilegibles, pero obra en nuestro poder el listado de maestros afectados por la penosa situación que describen en su oficio).

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