jueves, 6 de febrero de 2014

POLICRONICA

   Discordia…En lugar de fomentar la unidad, El Negro, viene a ponerle a los priístas futuro negro, porque desde ya está haciendo el papelón de peón de una mujer que buscará será la manzana de la discordia para la gubernatura.


En el Partido Revolucionario Institucional (PRI), comenzaron las escaramuzas, esa llamada “unidad” convocada el 10 de enero del 2014 por el senador René Juárez Cisneros, cuando lo nombraron como secretario regional del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI para los estados de Puebla, Tlaxcala, Morelos, Guerrero y Oaxaca, ya rompió con su hipócrita llamado. Ahora el mensaje es de desunión, cuando debería informarles a los aspirantes que ya no se muevan, ni se ilusionen. Desde el momento que llegó como delegado regional de la zona centro del país disque para cinco estados, escribimos en este mismo espacio que no era fortuito, si no que el trabajo a realizar será en favor de la actual Secretaria de Turismo, Claudia Ruiz Salinas, quien al no llegar a ser senadora uninominal, cuando en formula la buscaron, pues por los votos del PRI, se quedó en la primera plurinominal. Entonces la frustrada política en su primera incursión a un cargo de representación popular, ahora vendrá por la revancha, pero por la grande: gubernatura. ¿Por qué sostenemos esto?, pues en el Distrito Federal las patadas  bajo la mesa están a la orden del día, varios guerrerenses que están trabajando a su lado de Ruiz Salinas, en breve comenzarán a retornar a Guerrero para desplegar un trabajo político, primero lograr la candidatura a gobernador de Guerrero para su jefa y lograr la gubernatura posteriormente. El número uno que llegó fue precisamente el primer traidor del PRI, René Juárez Cisneros, quien entregó la gubernatura al Partido de la Revolución Democrática (PRD) en el 2005, a Carlos Zeferino Torreblanca Galindo, pese a su mal papel, llegó otro perredista, salido del mismo PRI, Angel Heladio Aguirre Rivero, quien se apresta a preparar el terreno para entregar la gubernatura al PRI, luego de sus berrinches del 2011, que su partido no lo quiso postular y prefirió a su primo el corrupto y ladrón, Manuel Añorve Baños, ex alcalde de Acapulco de donde se llevó más de dos mil 160 millones de pesos del erario, quien finalmente perdió, porque no tenía los votos suficientes. Ahora quien está preparando el terreno para que Claudia Ruiz Salinas titular de la Secretaría de Turismo, es el ex gobernador René Juárez Cisneros, quien para disfrazar la coartada, lo presentan como delegado para los estado de Puebla, Tlaxcala, Morelos, Guerrero y Oaxaca, en donde por cierto anda su “bravuconadas” que el cargo no lo tiene para ver que saca, que le paguen el hotel o lo inviten a comer. Para actuar con perversidad dejó unos días para ver como reaccionaban los priístas de Guerrero,  únicamente pasaron cuatro días, pues el 14 de enero, el propio ex gobernador Rubén Figueroa Alcocer y su hijo el diputado local plurinominal el pandillero, Rubén Figueroa Smutny hicieron su “madruguete” al reunirse únicamente con sus dos “hombres” que tienen para pelear la gubernatura: Mario Moreno Arcos, alcalde de Chilpancingo, el lampiño y el actual dirigente estatal del PRI, Cuauhtémoc Salgado Romero, el bigotes en campaña, pero estos dos ya recibieron el primer golpe por el delegado regional Juárez Cisneros, al sostener que todos los priístas que aspiren a ser candidatos a la gubernatura del 2015, tendrán que ajustarse a tres tareas: reestructuración interna con inclusión, equilibrio regional y legalidad, apegada a sus estatutos; reorganización para elaborar una estrategia político electoral con un plan y objetivos, y reunificación de todas las corrientes “poniendo en la mira de todos la construcción de la victoria y no pensar nada más en la próxima chamba”. El primer nocaut que le asesta al actual dirigente estatal del PRI, Cuauhtémoc Salgado Romero, del traidor, Juárez Cisneros cuando dice “no puede aspirar a la gubernatura porque no trabajaría para el partido sino para él, cuando tiene que ser el conductor y coordinador de todos los esfuerzos, el que se encargue de armonizar a los priistas, no generar una división que garantice su derrota”. Para justificarse Juárez Cisneros, recurrió a su diarreica declaración y emblanqueció su negra memoria y recordó “la dolorosa experiencia del 2006”. Para seguir golpeando a los “suspirantes” tricolores, les mandó un mensaje a Héctor Antonio Astudillo Flores y Manuel Añorve Baños, ambos ex candidatos y perfectos perdedores del 2005 y 2011 por lo que afirmó categóricamente “los que ya tuvieron su oportunidad deben hacerse a un lado para oxigenar al partido con nuevas actitudes”. Para hace creer que no viene hacer trabajo partidista para su “patrona” Ruiz Salinas, refiere “El Negro”, “generalmente un delegado no es enviado a su propia entidad”, sin embargo revela que una de las principales tareas que le encomendaron es reagrupar todas las expresiones “para que le vaya bien al PRI”. Para eso, se hace acompañar con su negra demagogia que una de las tareas debe ser permanente en el PRI, es la gestión social, “tomando las banderas sociales y defenderlas representando el sentir de la ciudadanía, sobre todo donde somos oposición”. También adelanta desde ahora con una amenaza, por si no le salen bien las cuentas, afirmando que si no se da una reunificación, “una reagrupación de todas las corrientes políticas del PRI en Guerrero, el partido no tendrá posibilidad de éxito, seguirá perdiendo elecciones si seguimos peleándonos al interior. Yo no concibo una confrontación y una desunión de todos los que participan y tienen alguna aspiración”. Con sus intenciones negruzcas definitivamente no va a lograr una unidad sólida, ideológica, sustentada en el compromiso, la congruencia en el trabajo, con un objetivo común que debe ser Guerrero, que no tenga que ver con las aspiraciones individuales de nadie, una unidad construida con desprendimiento, generosidad, humildad, con madurez y responsabilidad. En la vida real Juárez Cisneros, no es humilde, ni generoso, mucho menos responsable, porque cuando hace declaraciones son irresponsables, como el afirmar “tendremos un candidato pero no un gobernador priista. No se debe ver como un coto de poder donde solo un grupo quiere tener el control”, mensaje claro para los caciques Figueroas, a quienes debiera llamarlos al orden y conducción, puesto que ya están participando con su anarquía crónica, por eso el PRI ha perdido la gubernatura en las dos ocasiones, pues son de doble cara, primero le apuestan al candidato del PRI y cuando ya ven que está perdiendo, lo abandonan y apoyan al oponente para seguir garantizando el negocio del fertilizante. En lugar de hacer declaraciones torpes, Juárez Cisneros ya debió haber llamado de manera personalizada a cada uno de los que están el hándicap a la gubernatura, para no seguir construyendo esa falsa unidad, ni confrontando ni debilitándola. El peón Ruiz Salinas está como todo un negro trabajando para lo que vendrá, dijera el desaparecido prócer José Francisco Ruiz Massieu...Comisionado…Para desalentar un poco la violencia en Guerrero, definitivamente se necesita un comisionado nacional en materia de seguridad pública, aunque no lo quiera el gobernador perredista, Angel Heladio Aguirre Rivero, y apoyado torpemente por el coordinador del PRD en la Cámara de Diputados federal, Silvano Aureoles Conejo, quien descartó que la situación en Guerrero en materia de seguridad requiera la presencia de un comisionado especial, como en el caso de Michoacán. Claro que si se necesita, ya quedó demostrado en estos casi tres años de gobierno de Aguirre Rivero, no ha podido abatir a la delincuencia que opera impunemente, además de que todo el tiempo está desinformado, por ello es que no toma decisiones, además estas las deja en manos de otras personas, porque él está ocupado en otras actividades menos riesgosas, que empinar el codo. Una y otra vez ha dicho Aguirre Rivero, que no se requiere ningún comisionado y lo mismo se lo repiten sus correligionarios, para salir del paso, cuando todo los guerrerenses no pedimos, gritamos “auxilio”, y andamos con el “Jesús en la boca”, porque los delincuentes les da lo mismo levantar, secuestrar, exigir pago de pisos, que asesinar a plena luz del día. Los perredistas que solamente vienen de vacaciones y que el gobierno estatal les paga su estancia en el hotel, simplemente como jilgueros repiten que no hay necesidad de un comisionado de seguridad para Guerrero. Como ellos no viven la entidad, ni enterados del grado de violencia que se está librando entre la población. Parece que no es suficiente la aparición de los grupos de autodefensa para garantizar la seguridad de los pueblos. Como son gobierno en Guerrero, el PRD, no quiere la presencia federal a través del comisionado nacional de seguridad Pública, Manuel Mondragón y Kalb, pese a que éste y el mandatario estatal acordaron establecer un plan emergente, que tiene como fin disminuir los índices delictivos en ese estado. Entonces hay una contradicción del mismo jefe del ejecutivo y de los legisladores perredistas, si no quiere nada con el gobierno federal, entonces para que se reúna Aguirre Rivero, y si se cree autosuficiente, porque no ha parado la espiral de la violencia. Si Guerrero fuera un lugar seguro, no habría presencia de los llamados autodefensas, pero desafortunadamente estamos en medio de esa ola delictiva, y no vemos cuando comienzan a combatirla, mucho menos verle su final, porque los gobiernos  de los tres los niveles vienen y se van, el pueblo sigue igual en el abandono y hasta olvidado, porque así desgobierna el Partido de la Revolución Democrática, no resuelve los problemas, sino nada más los administra creyendo que el pueblo es un tonto…Libro…Desde Taxco, doña Rosario Cambray García, directora cultural, al público en general manda la misiva: “Les hacemos la más atenta invitación para que asistan a la presentación del libro "Ejército Libertador" del escritor e investigador taxqueño Francisco Pineda Gómez, mañana viernes 7 de febrero a las 18:00 horas en el Centro Cultural Taxco-Casa Borda. No se lo pierda.

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