PRINCIPAL DE NOTA ROJA

Matan a balazos a  vecino

 de la “4 de Abril” hoy tarde

Antonio Cantú Rendón.—Un albañil, hoy miércoles, por la tarde, cuando se encontraba en una casa particular, hombres armados, intentaron “levantarlo”, fue asesinado de varios balazos, cayendo su cuerpo a la mitad de la calle como si formara una cruz.

El ahora occiso fue identificado por su esposa y que respondía al nombre de Rafael Morales Luna de 25 años de edad, con domicilio en la calle “Independencia” de la colonia “4 de Abril” de esta capital.

Los hechos ocurrieron cerca de las 13 horas, de hoy miércoles, cuando el ahora occiso, salió de su casa desde muy temprano, para acompañar a sus vecinos que habitan en la calle “Democracia” en donde fue una velada de la cruz, ya que hace nueve días asesinaron a un supuesto carterista en la ciudad de Iguala de la Independencia.

Agregaron los testigos presenciales, y que después de haber ido a dejar la cruz al panteón, retornaron a la casa donde se hizo el novenario, enseguida comenzaron a tomar bebidas embriagantes en el pateo del domicilio de la calle “Democracia” de la colonia “4 de Abril”.

Indicaron los demás ebrios, que en esos momentos llegaron hombres armados a bordo de un vehículo de la marca Volkswagen tipo Bora, blanco, dos supuestos delincuentes descendieron de la unidad y directamente se fueron en donde estaba sentado Rafael Morales Luna, para luego a la fuerza lo sacaron.

El ahora occiso puso resistencia, en los momentos en que sería subido al carro, por lo que en esos momentos los supuestos pistoleros le proyectaron dos impactos de bala, uno en la cabeza y otro en el estómago.

Morales Luna al recibir los dos balazos de manera instantánea, que dando tirado a la mitad de la calla con los brazos abiertos mirando al cielo, en formando una cruz, sus vecinos y demás compañeros al ver estos hechos se metieron corriendo  los domicilios.

Mientras que los asesinos se dieron a la fuga con rumbo desconocido, y después de 30 minutos arribó una patrulla de la policía “Fuerza Estatal” y la esposa del ahora occiso Griselda Hernández Venancio les informó que los delincuentes ya se habían ido por la calle principal y les pidió que lo siguieran porque estaban escapando.

Sin embargo los uniformados no le hicieron caso a la viuda, y se quedaron solamente viendo al cadáver, en lugar de perseguir a los delincuentes que la viuda había dado a conocer que minutos antes del asesinado, huyeron.

Ante estos hechos sangrientos, queda demostrado que Chilpancingo y otras partes de la entidad, es un pueblo sin ley.