miércoles, 26 de octubre de 2016

PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

 “BurdelCárdenas” y Leyva
ignora infierno las 24 horas


Texo:Javier Francisco Reyes.—Tener a un priista como Marco Antonio Leyva Mena de presidente municipal que hace caso omiso, ante el ruido que generan los bares y centros nocturnos que proliferan en la avenida “Lázaro Cárdenas”, convertido en un gran “BurdelCárdenas” sin control las 24 horas, definitivamente es “vivir en un infierno”.

En esos términos concluyen los habitantes de esa poblada y transitaba arteria de la capital del estado de Guerrero, en donde antes había poca actividad comercial, principal de bares y cantinas con ruidos con decibeles desenfrenados que producen ruidos infernales.
Esa tranquilidad que se respiraba anteriormente, ahora está convertido en un ruidoso “BurdelCárdenas”, aunque oficialmente no está declarado, pero en el terreno de la realidad corre el alcohol las 24 horas, además se registran riñas callejeras, “levantones” y hasta asesinatos.
La presencia policiaca en la zona es inexistente, y de las representantes de Gobernación Municipal, tampoco se ha visto su vigilancia en la operación de cantinas y bares, que le dan en la práctica en una “Zona Roja” no declarada por las autoridades municipales que expiden las licencias de funcionamiento como giros rojos.
La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, realizó una recorrido por la zona ubicada al sur de la ciudad en qué se pudo corroborar sobre la queja del vecindario de que efectivamente “viven en un infierno” las 24 horas, pero se acentúa y se escucha más por las noches y altas horas de la madrugada.
Hace falta que el Ayuntamiento que preside el priista Marco Antonio Leyva Mena, realmente regule los negocios de los giros rojos que proliferan sobre la avenida “Lázaro Cárdenas” de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, que está convertido en un peligroso “BurdelCádenas”.
Existe decepción de los vecinos con el alcalde priista, Marco Antonio Leyva Mena a quien se le ha planteado reiteradamente de la existencia del problema que altera la vida cotidiana, pero desafortunadamente hace caso omiso en regular dichos establecimientos, pese a los múltiples escritos que se le han hecho llegar.
Con total indignación se quejan públicamente los afectados, entre ellas la vecina de la poblada y transitada avenida, María del Socorro Martínez, quien puntualizó: “Ni siquiera podemos vivir en nuestras propias casas, no podemos descansar, no podemos estar en paz. Vivir aquí se ha convertido en un infierno, ya no sabemos qué hacer ni a quién recurrir”.
En ese mismo tenor con una impotencia de no saber a qué autoridad recurrir, Abel Francisco Flores denunció que los establecimientos del lugar abren a la hora que quieren y cierran al día siguiente, sin que la autoridad los regule, pese a que violan el Bando de Policía y Buen Gobierno, pero la autoridad local es muy omisa.
Han llegado al extremo los vecinos y una forma de rechazar al gobierno municipal que encabeza Marco Antonio Leyva Mena, del Partido Revolucionario Institucional, que hasta han colocado varias lonas como pasacalles sobre la avenida Lázaro Cárdenas, en el carril Sur-Norte, en la que libremente externan su inconformidad  a las autoridades que no les hacen caso y que los hacen “vivir en un infierno”.
Textualmente esa protesta pública dice textualmente: ¡¡¡A toda la ciudadanía!!!: “Los vecinos de la Av. Lázaro Cárdenas, informamos la violación a nuestros derechos humanos y ciudadanos, estamos viviendo situaciones difíciles como: Los bares y centro de recreación mantienen por toda la noche la música con muy alto volumen evitando el descanso, lo cual está presentando consecuencias en los organismos”.
Agregan los inconformes: “La autoridad municipal ha puesto oídos sordos ante la petición de que se reglamente a todos los bares y centros que hay en los diferentes puntos de Chilpancingo, ya que estos se mantienen al aire libre”.
Exponiendo su libertad de expresión, añaden: “Lamentablemente cuando más solicitamos la intervención de la autoridad, como respuesta tenemos más alto el volumen de la música”.
En el escrito, los vecinos denuncian que están pasando por una situación difícil, “debido a  que los bares y centros de recreación mantienen toda la noche la música con alto volumen”,  lo que ya está comenzando a tener consecuencias en la salud de algunos vecinos.
Sostienen los agraviados que “Las autoridades municipales han puesto odios sordos a que se reglamenten a todos los bares y centros que hay en los diferentes puntos de Chilpancingo, que  se mantienen al aire libre”.
Otros vecinos entrevistados, pero solicitaron al reportero guardar su identidad en el anonimato, afirmaron que las personas que rentan los establecimientos son “influyentes y poderosas”, que tiene relación con funcionarios municipales y estatales, que hacen valer el tráfico de influencias.
Por la presencia de tantos tugurios de mala muerte en el “BurdelCárdenas”, también ha generado mayor inseguridad con asaltos a los mismos consumidores, transeúntes y los vecinos, pues no hay seguridad, por lo tanto los facinerosos aprovechan la situación.
Algunas cantinas del “BurdelCárdenas” ofrecen música en vivo que se extiende hasta altas horas de la madrugada, como es el caso del recién inaugurado restaurante “La Katrina”, ubicado también sobre la avenida, en una zona donde han abierto otros lugares de esparcimiento.
También se pudo corroborar en “Cárdenas 71”, a una cuadra de “La Katrina”, existe también otra zona de bares, discotecas y restaurantes, los cuales permanecen abiertos hasta altas horas de la noche y la madrugada, si no que las 24 horas.
Pese a las denuncias públicas con lonas, y algunas han sido retiradas por las autoridades de los Servicios Públicos, con el argumento que afean, no hay intervención del gobierno municipal capitalino, para regular y poner orden a ese tipo de negocios.

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