miércoles, 23 de noviembre de 2016

PRINCIPAL DE NOTA ROJA

 Torturado, atado de manos
y a balazos lo mataron, hoy

Antonio Cantú Rendón.—Con huellas de haber sido torturado, dos balazos en el cuerpo y atado de sus manos hacia atrás, fue encontrado muerto un hombre la mañana de hoy miércoles y cuando las autoridades iniciaban las diligencias de ley, fue identificado legalmente por sus familiares.

El ahora occiso respondía al nombre de Santiago Guerrero Carreto de 53 años de edad, con domicilio sobre la calle principal de la colonia “Lucía Alcocer de Figueroa” que se ubica al norte de Chilpancingo.
Eran cerca de las 6:30 de la mañana de hoy miércoles, en que las autoridades del número de emergencia  del C-4, anónimamente les reportaron de que en la avenida  “Llano Grande” que  colinda con el asentamiento humano  “Ampliación Lázaro Cárdenas” en la parte trasera en donde compran fierro viejo, estaba un hombre muerto.
La policía “Fuerza Estatal” fue notificada de los hechos sangrientos, por lo que se trasladaron hasta el lugar, y después de quince minutos que anduvieron buscando al ejecutado, finalmente lo hallaron en un terreno baldío que se ubica en la parte trasera en donde compran fierro viejo, a unos cuantos metros de lo que se conoce como el “Panteón Nuevo”.
Al llegar efectivamente se percataron que había una persona sin vida, y su muerte había sido a base de tormentos, a balazos, igualmente se dieron cuento que estaba atado con las manos hacia atrás y que tenía una trusa color rosa, una playera negra.
Como siempre, los peritos de la Fiscalía General del estado, se tardaron cerca de dos horas para llegar al lugar de la escena del crimen, en tanto también hicieron acto de presencia unas personas quienes informaron que andaban buscando a un familiar.
Uno de ellos de nombre Santiago Guerrero Organista, informó a los policías que buscaba a su padre que desde ayer martes, cerca del mediodía, ya estaba desaparecido.
Al observar el cadáver, con lágrimas en los ojos, dijo que la persona que estaba tirada entre la maleza y sin vida se traba de su padre Santiago Guerrero Carreto de 53 años de edad y que se dedicaba al trabajo de albañilería, por lo que no le hacía nada a nadie.
Después de la diligencias de ley del desafortunado hombre, fue trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense para practicarle la necropsia de ley, y más tarde será entregado a sus familiares.

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