miércoles, 15 de marzo de 2017

PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

 Robo al consumidor por redondeos
 en la Superla, Oxxo y  Farmapronto

Wendy Alanís.-Sin previo aviso ni permiso del cliente, los dueños o representantes legales, ordenan a los empleados de la tiendas  Oxxo, Farmapronto y Superla en Chilpancingo aplicar el “redondeo”, las dos primeras cadenas comerciales a nivel nacional, la última legendaria tienda ubicada en la ciudad capital del estado de Guerrero.

La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, realizó un recorrido por estas  tres tiendas, en la que  descubrió que la famosa miscelánea de autoservicio con razón social  “Superla”, localizada en el zócalo capitalino, es una de las tiendas que se suman al redondeo forzoso y sin autorización del consumidor, utilizando para ello el pretexto de que “nosotros no utilizamos los centavos”, provocando con esto no solo el encarecimiento de la canasta básica que son artículos de primera necesidad, sino también el resto de todo tipo de artículos.
Y dejando sin aclarar el destino correcto de esos centavos que se recolectan en su exclusivo redondeo al que obligan a la ciudadanía chilpancingueña.
Pero todo esto sin contar con la mediocre y rabanera (grosera) atención que el personal brinda al comprador, en su mayoría capitalinos.
Cabe mencionar que dicho expendio ya ha sido sancionado en al menos una ocasión por la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO).
Otro de los establecimientos comerciales que se adjudican sin autorización ni antelación el redondeo de sus centavos, son los tendajones rojiblancos que invadieron repentinamente la república mexicana y que trabajan las veinticuatro horas del día, mejor conocidos como Oxxo.
Los empleados que ahí laboran redondean los precios de los aproximadamente cincuenta artículos o más, sin consultarle al comprador si desea redondear o no.
Pero al preguntarles el por qué se aplica el aumento sin previa consulta, arbitrariamente contestan: “porque si no los cobro me van a faltar de veinte a treinta pesos en la cuenta y no los voy a pagar de mi salario”, “no tengo centavos”, ya no se usan los centavos”.
Sin embargo; esa no es la única excusa que utilizan los dependientes de los Oxxos, en ocasiones de manera burlona contestan a la clientela, “que el redondeo se aplica en automático”, “que tanto chillan si esa morralla va a dar a una fundación” de la que nunca saber dar el nombre.
El cinismo de quienes despachan en estas expendurías de color rojo raya en la burla y majadería y lo peor es que no hay quien los pare.
Pero a todo esto aún falta la cereza en el pastel de este robo descomunal de redondeos obligatorios a la sociedad mexicana que tan carcomida esta en su bolsillo con la falta de oportunidades, gasolinazos y narcoviolencia en este país de políticos transas y vendepatrias.
En la céntrica calle de Madero, aun costado del conocido andador Zapata, se encuentra una sucursal de la empresa conocida como Farmapronto, en cuyo interior, las empleadas hacen su agosto al cobrarle al usuario de ostentosa farmacéutica, cincuenta centavos más cada compra ya sea de medicamento, pañales o leche para bebé.
Y al cuestionarles el porqué de ese cobro extra, solo mencionan que no tienen nada de cambio o que lo tienen que hacer porque no les queda de otra, llegando a cobrar hasta un peso con cincuenta centavos de más, esto a pesar de tener colocado un buzón para quejas y denuncias con whatsapp: 7771357697.
¿Y a esta farmacia quién le autorizó el cobro del redondeo? Porque es la única que lo hace en todo Chilpancingo.
Sin embargo toda esta cobradera de centavos que al final del camino se convierten en exorbitantes y jugosas ganancias para el dueño o propietarios de estos establecimientos comerciales, dichas ganancias nos son reportadas al fisco y por lo tanto no redundan en beneficios para el pueblo como escuelas, hospitales, calles etcétera, algo que además tampoco se ve reflejado en su comprobante de compra, evidenciando con ello el robo del cual estamos siendo objeto y del cual no nos damos cuenta.

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