miércoles, 26 de julio de 2017

PRINCIPAL DE NOTA ROJA

Buscan a los asesinos de 7
en Olinalá y Ahuacuotzingo
Antonio Cantú Rendón.—Por un lado  las autoridades de la Fiscalía General del Estado de Guerrero, no solo ya identificó a los gavilleros de la masacre de siete personas,  sino que ya  los busca en comunidades de Olinalá y Ahuacuotzingo, y por el otro, familiares de cinco policías municipales hoy miércoles hacían los tramites de los cuerpos para darles cristiana sepultura en sus lugares de origen.
La tarde de hoy miércoles, se conoció que la Fiscalía General del estado ya instrumento diversos operativos con el apoyo de las fuerzas federales y estatales para capturar a los responsables de la masacre de ayer martes y hay firmes indicios que son las mismas personas que cometieron el  asalto en Ahuacuotzingo, lo hicieron el primero de junio del año en curso en Cualac en donde se llevaron
más de tres millones de pesos y fueron asesinados también personas.
Existe la posibilidad que en las próximas horas y días las autoridades policiacas atrapen a los responsables, en tanto luego de la ejecución de las siete personas ayer en el municipio de Ahuacuotzingo con puros rifles AK-47, mejor conocidos como “cuernos de chivo” y  R-15, cinco policías y dos empleados del programa Prospera, ya fueron depositados en las instalaciones del Servicio Médico Forense de Chilpancingo, en donde hoy miércoles se les estaba practicando la necropsia de ley y también ya se encuentran identificados los gavilleros que cometieron la masacre.
Las personas que perdieron la vida en la emboscada registrada  ayer a las 8:00 de la mañana en la carretera de  terracería de Rincón de Cozahuapa-Zompazolco, en el punto conocido como el bordo, cuando se dirigían a entregar el recurso económico del programa federal Prospera a las localidades más pobres del municipio de Ahuacuotzingo.
Los ahora occisos responden a  los nombres de los policías municipales de Ahuacuotzingo, Reyes Gatica Cantorán, Anatalio Ramírez Rodríguez, Juan de Dios Martínez Garibo, Jacinto Arce Campos, Lamberto Ortega Teodoro,  tres son originarios de la cabecera municipal y los dos últimos de la comunidad de Mitlalzingo.
También fallecieron en la emboscada los empleados del programa Prospera, Joshua  Noriega Sánchez y Miguel López Ramírez, originario y vecinos de la Ciudad de México.
Como se recordará que ayer martes cuando eran cerca de las 8:00 de la mañana, cuando cinco policías municipales a bordo de la patrulla número  003 con placas de circulación HF22407 del estado de Guerrero, resguardaban empleados federales  del programa Prospera cuando se desplazaban  en una camioneta de la marca Nissan tipo doble cabina y al transitar sobre la carretera de terracería Rincón de Cozahuapa-Zompazolco, en el punto conocido como el bordo fueron atacados a balazos por una gavilla de asaltantes.
En esos momentos de la emboscada, el chofer y el copiloto fueron asegurados por los delincuentes al dispararles rafas de sus rifles de alto poder de frente, mientras que los otros tres elementos, dos de ellos quedaron en la caja y otro más se bajó e intentó darse a la fuga, pero cayó abatido unos metros más adelante.
Los delincuentes supuestamente al ver que habían asesinado a todos, procedieron a saquear la camioneta de los empleados federales de donde sustrajeron cerca de un millón de pesos y se dieron a la fuga con rumbo desconocido.
En tanto que una mujer logró escapar de las balas y al parecer habría dado parte a las autoridades de lo ocurrido durante la mañana de ayer y por ello llegaron elementos de la policía federal y Ejército mexicano hasta el lugar de los hechos.
Asimismo se conoció que los asaltantes que privaron de la vida a las siete personas son originarios de comunidades del municipio de Ahuacuotzingo, y ya están identificados, según información de los habitantes de ese lugar a las autoridades investigadoras.
Los familiares de los siete difuntos ya se encontraban molestas con las autoridades, ya que casi todo el día del martes estuvieron tirados en la intemperie los cadáveres, por lo que exigían que se los entregaran, ya que son de escasos recursos económicos para pagar los gastos de traslados.
Agentes policiacos y peritos, les informaron que era necesario que los cuerpos fueran llevados a las instalaciones del Servicio Médico Forense de Chilpancingo, para que se les practicara la necropsia de ley, pero varios dolientes afirmaron que sus seres queridos no contaban con seguro de vida, por ello consideraron innecesario ese trámite burocrático y tardío.

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