NOTA

Protestaron hoy
tarde reporteros

Un grupo de reporteros de Chilpancingo hoy martes por la tarde demandaron justicia y protección a la familia de la comunicadora María Eugenia Camargo Patricio, editora del diario “Este Día”
Lo anterior, se realizó la protesta tras el asalto y agresión de hombres armados y la negligencia de la Policía Federal, a la editora del diario local Este Día, María Eugenia Camargo Patricio, ayer lunes por la madrugada.
Antes de las 14 horas de hoy martes, un grupo de reporteros de la capital arribaron

al Palacio de Gobierno, en donde policías estatales les cerraron el paso, lo que ocasionó que ingresaran por encima de las mallas metálicas.
Como se informó, la editora del diario “Este Día” fue detenida junto con su hija y sobrino por hombres armados el lunes, cuando se dirigían a Ciudad de México por la Autopista del Sol, y luego de ser despojada de 50 mil pesos en efectivo, le quitaron la camioneta en la que viajaba y la amordazaron junto con dos familiares, para luego ser arrojados en una barranca.
Los reporteros  externaron y portando una lona,  “Denunciamos la omisión de la Policía Federal, que recogió a la editora junto con su hija y un sobrino para luego ser abandonados en Tierras Prietas (al norte de la ciudad), fueron dejados a la intemperie, sin comunicación ni dinero”.
En su momento el reportero Bernardo Torres de la Agencia Periodística de Investigación (API) durante la protesta denunció lo ocurrido a las víctimas que participaron en la protesta y describieron que la acción de los agentes federales fue de recoger a las víctimas y luego abandonarlas, sin dar parte a sus superiores de dichos hechos.
En su momento, el periodista en fuente de seguridad y esposo de la editora, Manuel Cruz Calderón, dijo temer por la seguridad de su familia, ya que en la agresión el grupo de civiles armados les quitó a las víctimas teléfonos celulares e identificaciones.
Ante estos hechos condenables, dijo que de haber acciones en su contra, será responsabilidad de las autoridades estatales y de justicia ante la omisión de atender el crimen, y se deslindó del uso que le puedan dar a la unidad robada.
Informó que “Mi esposa iba a comprar ropa a la Ciudad de México y fue agredida por este grupo de armados. Nosotros queremos dejar en claro que nos deslindamos de lo que puedan hacer con el vehículo, pero también dejamos en claro que existe temor, porque esa gente tiene datos de mi familia”, indicó.