ARTÍCULO

Radiografía de la
elección presidencial

Efraín Flores Maldonado*
“El oficio del Rey y el Príncipe, no es pelear, sino mandar y gobernar”. Giovanni Botero.
Mientras se acerca el segundo debate de los candidatos presidenciales, sus campañas políticas avanzan, sus temáticas, estrategias corrigen rumbos y afinan objetivos políticos. Sin duda, la aspiración que se desarrolla con destacados signos de interrogación, es la de José Antonio Meade Kuribreña, por su inicial y persistente ubicación en un tercer lugar. Sin embargo, también es cierto que precisamente por ello, la estrategia general ha tenido profundos cambios, como la elección de una nueva dirigencia nacional encabezada por René Juárez Cisneros y golpes de timón sorprendentes pe

ro apreciados por los electores como el deslinde inteligente que el candidato tricolor ha hecho en las últimas horas del tutelaje del Ejecutivo Presidencial en funciones. En el primer caso, René Juárez Cisneros ha propiciado el retorno y crecimiento de la confianza de simpatizantes, militantes y cuadros políticos del PRI, que miran en su persona, un perfil político de peso completo, nacido en las entrañas del PRI, con el que pueden encontrase y dialogar de manera natural. Ello hará posible maximizar el activismo de las bases militantes, asumir compromisos y poner, como lo pidió RJC, “todo su amor” para propiciar el triunfo en la elección presidencial. El deslinde del candidato tricolor era necesario y urgente. El sistema político mexicano, surgido en 1929 con el nacimiento del Partido Nacional Revolucionario, había venido mostrando un reiterado contraste entre la sumisión de los candidatos presidenciales, con el Ejecutivo en turno y una vez en la silla presidencial, su negación escandalosa de la tutela que a todas luces les había otorgado la candidatura. Mauricio González de la Garza en su excelente libro titulado “La Ultima Llamada”, señaló que lo único que, hacía falta para hacerle justicia al pueblo de México, más que negar al presidente antecesor, era necesario que al término de su mandato “se le fusilara junto con toda su familia en el Zócalo de la capital del país”. Curiosamente Carlos Salinas de Gortari fue el primer presidente entrante, que no negó a su antecesor Miguel de la Madrid y, por el contrario, lo designó Director General del Fondo de Cultura Económica. Por ello, el educado deslinde de Meade Kuribreña respecto de Peña era necesario y por lo tanto es insinuante y convincente. Quiere decir que esta consiente de su nombre y valía propia, antes del sexenio de Enrique Peña Nieto y que gobernará con autonomía constitucional y personal, más allá de los intereses y nostalgias del actual presidente. En la entrevista televisiva de este martes con Joaquín López Dóriga, en la que participaron los líderes partidistas del PAN, MORENA y PRI, René Juárez Cisneros lo dijo claramente. El candidato del PRI es el más experimentado, competente académicamente y con las propuestas más claras y convenientes para México, entre otras, una verdadera educación de calidad que asegure un mejor destino a los estudiantes de educación básica del país. Sin educación no hay presente… ni futuro. Por ello, con ideas, argumentos y evidencias, Juárez Cisneros espera que los electores de México, no voten motivados por un minuto de arrebato y coraje, y cancelen las posibilidades de tener un gobierno racional, honesto y de unidad nacional. Bien lo dijo Juárez Cisneros, las encuestas son fotografía del día y reiteró que el PRI y la mayoría de los mexicanos, dibujarán en una radiografía, en las urnas electorales del país, el contenido final de la voluntad popular. *Doctor en Investigación en Ciencia Política.