SUMARIO DE PRINCIPAL DE NOTA ROJA

Por corrupción de Vélez, sin
derechos laborales la occisa

Juan Manuel Molina.--Por falta del pago a aseguradoras, los familiares de la enfermera Adriana Salgado Betancourt, quien fue asesinada el miércoles en la noche en un fuego cruzado en un establecimiento en el andador Zapata, podrían no cobrar un seguro de defunción de aproximadam

ente 50 mil pesos.
Este jueves, representantes del Frente Democrático de Trabajadores de la Secretaría de la Salud convocaron a una conferencia de prensa para exigir justicia por el asesinato de la enfermera, quien laboraba en el Centro de Salud Alameda.
El medico Hilario Zúñiga Escamilla y la trabajadora administrativa, Erika Salgado García, señalaron que por la mala administración de la secretaria general de la sección 36 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de Salud (SNTSA), Beatriz Vélez Núñez, los familiares de Salgado Betancourt no serían beneficiados ni con el otorgamiento de la plaza que le correspondía.
“La secretaria de la sección se prestó para que los seguros fueran recortados, inicialmente todos los trabajadores, tuvieras un año de antigüedad dos o tres, teníamos la facilidad o más bien nos otorgaban un seguro de 50 mil pesos, ahora nos pusieron en categorías, es decir, si tienes de un año a cinco de antigüedad te dan cinco mil pesos, de cinco a diez, diez mil”, señaló.
La enfermera asesinada cumplía una doble jornada de trabajo para sostener a su familia, un turno en la Secretaría de Salud y otro en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE), donde cubría turnos.
De acuerdo con Erika Salgado García, los sueldos para una enferma deberían rondar los 9 mil pesos, sin embargo, la abultada nomina en el sector Salud provoca que trabajadores se dividan el pago de una plaza, con lo que el pago puede caer hasta los 2 mil 500 pesos.
Aunque el incidente se registró mientras Salgado Betancourt se dirigía a su casa, después de cumplir con su jornada laboral, integrantes del Frente Democrático de Trabajadores de la Secretaría de Salud, solicitaron que el Ejército y la Marina refuercen las medidas de seguridad en sus centros de trabajo.
“Sabemos que era una trabajadora ejemplar, una madre de familia, el sostén de su familia, porque era una madre que atendía a sus tres hijos, que hacía una esfuerzo por llevar un salario a su casa”, enfatizó Zúñiga Escamilla.