SUMARIO DE NOTA CON FOTOS

Rercordando a Darvelio
en entrevista periodística

Héctor Contreras Organista.--Murió el gran cantante guerrrerense Darvelio Arredondo, así lo informa nuestro amigo Sergio Partearroyo Baranda quien a su vez recibió la infausta noticia de nuestro querido paisano y amigo el ingeniero Sergio Vázquez.
A Darvelio Arredondo Villanueva lo recordamos a través de una entrevista que le hicimos hace años en Chilpancingo y porque participó en la presentación de nuestro libro “Guerrero Canta”, el 19 de diciembre de 2009, en la plaza central de Chilpancingo junto con Rolando Morlet Martínez, primera voz del trío “Los Santos”. Se va la alegría musical de Guerrero en la vo

z de ese maravilloso cante nuestro. En paz descanse.
Fue en el curso de la segunda semana de enero del año 2 mil cuando saludamos en Chilpancingo a uno de los mejores intérpretes de la música guerrerense, Darvelio Arredondo.
Con un grupo de amigos convivíamos esa mañana en el centro de la ciudad cuando llegó Darvelio, saludando a todos con esa su sonrisa franca, con ese su carácter costeño, alegre y, como es natural en él: desparramando amistad.

Nos permitió un diálogo-entrevista y charlamos un poco sobre su hermano Tadeo, el famoso compositor que murió hace años y que hizo famosas muchas canciones a través de la Sonora Santanera, particularmente su éxito internacional, “Atolito con el dedo”, que es la canción y carta de presentación de Darvelio.
Recordamos la anécdota aquella cuando en la televisión, en el programa tempranero de Guillermo Ochoa se presentó Darvelio, y la ocurrente periodista y locutora Lourdes Guerrero le preguntó:
-¿Por qué te llamas Darvelio?
En su desparpajado y alegre tono costeño, Darvelio respondió:
“Pos porque así quisieron mi Papa y mi Mama”
Todos reímos porque así, sin acento en Papá o Mamá, se oye más sabroso; es la forma de hablar de nuestra gente de las costas: Papa y Mama...
Darvelio está aquí, frente a nosotros y no vamos a desaprovechar la oportunidad de entrevistarlo.
Antes, apunta que “las gringas” son felices cuando pronuncian su nombre: Dar... velio... y hace unas señas como sosteniendo algo que a ellas -dice- les encanta... y deja escapar una sonora carcajada de pícara satisfacción.
Darvelio Arredondo nació en Tixtla, Guerrero, el 13 de febrero de 1934. Fueron sus padres Filiberto Arredondo y Aldegunda Villanueva de Arredondo.
“Por azares del destino nací en Tixtla, y a los ocho meses me trasladaron a Acapulco, porque mi papá era telegrafista”.
Refiere que su papá hizo un club de señores al que llamó “El kinder”, con don Procopio González.
“Mis padres nacieron en San Marcos. Mi papá fue telegrafista en Tixtla, en Iguala, en Acapulco, y en Chilpancingo. Estuvo trabajando 58 años como telegrafista, trabajó para el gobierno 28 años más de lo que debía haber trabajado.
-¿Cuándo descubriste que tenías esa inclinación, esa capacidad para expresarte a través del canto?
“Es de anécdota, porque yo tuve unos hermanos que formaron el Trío Acapulco en México (ciudad).
Cuando fui a la Secundaria en Acapulco no me hacían prueba porque decían que yo cantaba bonito. Estando en tercer año de Secundaria, nos juntamos con Leonel Polanco Gálvez, que fue después la Primera Voz de “Los “Tres Caballeros”, e hicimos el “Trío Los Costeñitos”, con Alejandro Barrientos.
Nos íbamos a dar serenata a Puerto Marqués, la estación de radio XEBB se inauguraba e íbamos también a dar serenata, en los años 50. Y quién se iba a imaginar que después Leonel iba a ser la primera voz de Los Tres Caballeros y con esos éxitos de “El Reloj” y “La Barca”, y últimamente me he encontrado con él y él me hacía dueto porque yo trabajé tres años en el Acapulco Plaza.
Yo no tenía la intención de grabar, me oyó por suerte Gilberto Parra, el autor de “Por un amor”, me dijo que me iba a contratar, eso fue en 1957 fue cuando me llevó a grabar a la compañía Columbia Internacional.
Grabé cuatro discos sencillos, de 45 revoluciones por minuto. Fue cuando se le hizo un homenaje a José Agustín Ramírez, pero era una canción que mi hermano Tadeo compuso en honor a José Agustín Ramírez y dice: “Hoy la luna y las estrellas están llorando porque se fue su cantor, el que se inspiró con ellas dibujando su esplendor”, así iniciaba la canción.
Después me pusieron de otros compositores, yo me metí a un negocio de sinfonolas y no me interesaba la cosa artística, porque mi negocio iba floreciendo. Llegué a tener 39 sinfonolas, abarroté Acapulco con sinfonolas.
Cuando mi hermano Tadeo murió en 1976 fue cuando me puse a grabarle sus canciones, en ese tiempo el director artístico que estaba en Columbia se pasó a la RCA Víctor, me volvió a contratar y entonces grabé las canciones de Tadeo, como es “Costa Chica”, “Atolito con el dedo”, “Costeña Hermosa” y otras más, quien sabe si te acuerdes de “Costeña Hermosa”, esa que dice: “Costeña que al caminar llevas la gracia de la palmera sensual, mi flor de acacia, tu boquita de coral me vuelve loco porque llevas al besar sabor a coco”.
He hecho siete long play, son setenta canciones, son pocos realmente pero no me dediqué de lleno. Lo que sí ayudé mucho porque la Sonora Santanera me hizo el favor de grabarle “Atolito con el dedo”, “Carnaval en Acapulco”, “Sarta de Mentiras”, puros discos de oro que fueron en ese tiempo.
El primero de julio del 77 se le hizo un homenaje a Tadeo en Acapulco y yo llevé a la Sonora Santanera, fue un homenaje muy bonito en el zócalo de Acapulco y luego le otorgaron en ese tiempo una calle que se llamaba Terraplén y ahora se llama Tadeo Arredondo.
Estuve 11 años trabajando en el Centro Acapulco, me tocó la inspiración de que grabara con mariachi nuestra Chilena Guerrerense, estuve cantando en las barcos trasatlánticos y se me vino la inspiración para darle más alegría a la música de Guerrero, meterle mariachi, y tuve los mejores compositores como arreglistas, como Fernando Z. Maldonado, Rigoberto Alfaro, Rigoberto Pantoja y elementos del Mariachi Oro y Plata y del Mariachi Vargas, fue un éxito grabar esas canciones y con ese Mariachi Vargas.
Lo más bonito fue cuando grabamos “Atolito con el dedo” y otro que la mitad es de Álvaro Carrillo y la mitad de mi hermano que se llama “Alingo lingo”, son dos canciones que se han fundido, le ponen “El Negro de la Costa” y “Alingo lingo”.
Algunos la cantan como el negro y otros como alingo; ya se hizo del dominio público porque ya le pusieron muchos versos, como a La Sanmarqueña.
-Siento que la música guerrerense ha dejado de importarle al guerrerense, ¿estaré equivocado, Darvelio?
“Tienes algo de razón porque en realidad nos ha faltado impulsar nuestra música. Yo quisiera grabar canciones de mío hermano Tadeo que muchas canciones se quedaron inéditas, y muchas canciones de compositores guerrerenses como los que están en boga, pero ya no ha habido oportunidad, porque hacer una grabación sale carísimo, el mariachi cobra muy caro.
“Estoy con la idea de hacer algo con un trío o con la guitarra. Yo hice un long play con mi guitarra con canciones de José Agustín Ramírez, alcancé a grabar siete canciones, fue un homenaje que le hicimos a José Agustín Ramírez. Hace poco estaba revisando y me dije, bueno, ¿por qué no vuelvo a regrabar esto? Inclusive canciones con la guitarra que están bien logradas, estoy con la idea de volver a regrabar esto”.
-¿Has estado en otros países con nuestra música?
“Sí, cómo no. Me tocó en el tiempo de Cervantes Delgado que me ayudara mucho, porque hicimos una gama de discos y fue cuando se hizo más caso a la música guerrerense, y fuimos a Canadá, estuvimos en Toronto, en Montreal, estuvimos en Nueva York, en Los Ángeles, en varias partes y después cuando entró Figueroa fuimos a Japón. Les gustó tanto “Atolito con el dedo” que allá andaba el director de la RCA Víctor de Japón e hicieron un Mariachi de japoneses y fueron a Acapulco y cantaron “Atolito con el dedo”, pero parecían mariachi mexicano y las voces mexicanas.
Cuando fui a Japón la RCA Víctor de México me hizo una carta para la RCA Víctor de Japón, y cuál no sería mi sorpresa que me mandaron un arreglo floral pero aparte con fruta, y en ese tiempo la fruta estaba en Japón pero carisísima, entonces fue una cosa muy hermosa que la compañía me haya hecho ese obsequio, y todas las atenciones que recibí en Japón.
En toda la república “Atolito con el dedo” se conoce. Yo he trabajado en los palenques, en la televisión, en Siempre en Domingo, en Hoy Mismo, con el gallo Calderón y con muchos conductores muy buenos. Siempre me gustó representar a nuestro estado en diferentes partes de la república y allende las fronteras”.
-Creo que a ustedes les tocó vivir una época muy bonita cuando las cosas se hacía con el corazón en la mano, con el deseo de que el nombre de Guerrero sonara muy fuerte dentro y fuera de nuestro territorio, ¿qué es lo que está pasando ahora con nuestros artistas, qué supones que está sucediendo?
“Actualmente hacer una grabación con mariachi sale carísimo, en ese tiempo yo tenía el negocio y eso me ayudó para mandar hacer los arreglos, porque cada grabación sale muy cara, para hacer una grabación necesitas tener un respaldo económico muy fuerte”.
-¿A eso se debe que nuestra música ya no se escuche?
“Bueno, aparte de eso como que no nos interesa la música o algo así. No lo quisiera decir pero me dijeron: ¿Qué no habría modo que cantaras otras canciones que no sea Atolito con el Dedo y El Negro de la Costa? Eso ya se hizo una institución, donde quiera que llego lo primero que me dicen es: “Atolito con el Dedo”... ¿Te imaginas cantarla 365 días durante 11 años en el Centro Acapulco?
-¡Ya te la aprendiste!
“¡Ya me la aprendí, jajajaja!”
-¿Cuál sería la recomendación de Darvelio a nuestras autoridades, a la gente que de alguna manera está ligada al arte guerrerense y que de alguna manera pudieran apoyar e impulsar nuestra música? Porque en ninguna estación de radio del estado de Guerrero se toca música guerrerense, y es una vergüenza.
“Es cuestión de volver a empezar para que se vuelva a revivir nuestra música, porque acabo de estar escuchando en Cuernavaca mis grabaciones, y digo: Por qué esto no le he sacado a la venta. Estoy con esa idea, yo mismo voy a tener que trabajar, solitario, como La Bikina.
Hicimos un long play para el Mariachi Vargas. Dice ahí: “El Mariachi Vargas desde Acapulco”, pero eso lo pagó el Hayyat, porque era su aniversario, pagó 2 mil compacs.
Lo agarró un sobrino mío, Jorge, El Puma, él ha estado sacando esa producción.
Yo le decía a Toño Delgado, hijo del maestro Antonio I. Delgado: Por qué no me pasas las pistas que se hicieron de parte del gobierno para que yo las cante. No se puede, porque resulta que ahora las tiene un particular porque ni siquiera están en el gobierno”.
-O sea, que andamos mal, muy mal, ¿y la recomendación cuál sería entonces?
“No sé de qué recomendación quisieras”
-Pues que el gobierno se interese por lo nuestro...
“Pues que le hagan caso a los guerrerenses”.
-¿Hay algún testimonio de gratitud para quien te enseñó a tocar la guitarra, para quien te orientó en la infancia de tu carrera artística, hubo maestros, hubo guías?
“Fíjate lo que es la vida. Mi papá quería que yo aprendiera telegrafía, así que siempre estaba yo con botecito: tic, tic, tiric, tic, tic, tiric tic, tic..., pero dije no, esto no. Pero como lleva algo de musical, y analizando después, a mi papá le gustaba tocar el piano, el violín y tocaba el clarinete y la guitarra. Yo le decía que me enseñara unos tonos, fue todo lo que aprendí, mis primeros tonos: primera de Do, segunda de Do: Mi, Fa, yo te conozco bien todo, sé un poquito de Nota, pero no por completo.
“Tampoco hice caso para poder tener la facilidad de componer. Yo tengo algunas composiciones también, pero son al estilo antiguo. Fíjate, como una que dice:
“Milagro que siento en el alma como una quimera que ha cristalizado; milagro de ver que mi anhelo por besar tu boca hoy se ha realizado; mi vida sin tu amor vagaba sufriendo un dolor trashumante siempre buscando tus besos buscando tu amor”...
“Fíjate qué bonito, pero ahora ya no me puedo inspirar así, no sé por qué. Pero son cosas muy bonitas que en ese tiempo salían pero fueron cosas líricas, y claro, con el poco sentir musical que tenía y de tocar la guitarra. Ahorita ya lo domino perfectamente. Pero como que se olvida, porque después me tocó que me acompañaban orquestas, conjuntos, mariachi y como que te haces un poquito flojo. Tengo ahorita setenta pistas que puedo utilizar en televisión”.
-¿Cuál es la satisfacción máxima de Darvelio Arredondo en esta carrera?
“Cada grabación que tú haces es como si hicieras un hijo, porque ahí te das cuenta de lo que estás interpretando y te da mucho gusto, esta es una satisfacción muy grande en tu ser”.
-¿Has admirado a alguien como interprete?
“Bueno, a muchos artistas, y además conviví con ellos. En Acapulco trabajé en todos los Centros Nocturnos, en todos tuve la oportunidad de cantar en dueto, y aparte como compañeros con José Alfredo, con Tomás Méndez, con Lucía Méndez, con muchos artistas. La Novia de México, Angélica María son los de mi rodada, me tocó también con la Reina de los Charros, con esta niña Ávalos, Aída Cuevas. He trabajado con casi todos los compañeros, yo estoy en la Asociación Nacional de Actores. Me hicieron un homenaje en el Fuerte de San Diego donde me felicitan por mis 30 años de mi vida artística, pero llevo 37”.
-¿Estás casado?
“Sí, yo tengo mi esposa, acabamos de cumplir 40 años de casados, tengo un hijo que es ingeniero civil, y otro que es ingeniero de la cosa de los aires acondicionados y otra hija que es licenciado en administración turística”.
-Aprovecho este momento para pedirte un saludo para la juventud guerrerense...
“Realmente podría ser un saludo pero a la vez una recomendación para que procuren tener datos de los artistas, de los compositores, de los cantantes y se den cuenta de los valores que tenemos y que tuvimos, y un saludo para que lo hagan”.