COLUMNA

DH-1-07-18
Tino Gatica

Las asociaciones civiles, o sociedad organizada reto ante la Cuarta Transformación
En esta nueva administración federal, encabezada por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aunque se han visto sus acciones a partir de sus discursos, por incipiente existe una sensación de esperanza porque “algo” se pueda tener como beneficio personal, familiar o en la colectividad, aunque precisamente porque es una manera distinta, singular debido a que se rompió con esquemas de ese pasado reciente, es que se resienten estos efectos. Y bueno, el caldo de culti

vo para las especulaciones de personas ociosas , supongo, es que se esparcen expresiones de que las organizaciones civiles no van a ser tomadas en cuenta o bien que van a desaparecer. Y como toda manifestación del ser humano, como ente sociable o inserto en sociedad es que no considero que sea muy cierta dicha versión. Y esto es como en todo inicio de todo gobierno es más la incertidumbre por saber cómo vienen y qué están haciendo quienes ahora tienen el poder abanderados por el presidente de México, que si se rompen con esos moldes, es porque en definitiva dieron lo que tenían que dar, o bien que fueron usados de manera tan perversa que dejaron su utilidad para el beneficio social. Muchos fueron los males, las quejas y las denuncias de quienes fueron poderosos en nuestro país, que arruinaron las formas de vida de nuestros semejantes, que optaron por cambiar el estado de cosas, dándole ese voto de confianza a Andrés Manuel López Obrador que en definitiva tiene que aplicarse en ver las maneras de ayudar a los diversos sectores o grupos que integran nuestra sociedad. Si bien toda acción tiene una reacción, en lo personal, supongo que solamente yo lo pienso así, es que deben ser más los remedios que los males. Es decir que en estas acciones, se tengan o podamos gozar de mejores situaciones de bienestar. Y cuando se considera que las asociaciones civiles serán ignoradas por AMLO o así se especula, es debido a que muchas que se fundaron antes de las elecciones del 1 de julio eran solamente para ser usadas como bolsas sin fondo, muchas creadas con mucho fin de lucro, demasiado lucro.  Por eso es que así se especula, pues solamente tuvieron el fin de ser utilizadas para desviar recursos financieros, sin antes pasar por el procedimiento legal, cumpliendo con los requisitos que exige la normatividad. El manejo marcadamente político y con fines de clientelismo es lo que permitió a que muchos de sus secretarios o presidentes, posiblemente algunos de sus más allegados de su mesa directiva se apropiaran de recursos que ahí llegaban vía los compromisos de carácter partidista o como un pago por determinada ayuda. Creo que para el caso es lo mismo. Ahora, ante ese reto que representa esta dichosa intención de la Cuarta Transformación que se pretende por la cúpula de quienes tienen el poder, emblematizados en  la persona de AMLO es que se tienen que modificar muchos comportamientos, las mismas estructuras de poder, así es que se espera (es anhelo personal) que ahora se reconozca, se gratifique la labor real, verdadera, que se pueda comprobar de estas organizaciones o agrupaciones civiles, que ahora sí tengan la respuesta adecuada de parte del gobierno, pero como una consecuencia formal. Es por lo que mucha gente con capacidad de elegir, optó por este cambio de administración federal que apenas está en desarrollo. Y que se recompense el verdadero trabajo, nada de simulaciones.