lunes, 11 de febrero de 2019

COLUMNA

DH-1-07-18
Tino Gatica
No es lo mismo pedir la aparición con vida de los 43 normalistas de Ayotzinapa que pedir dinero en la caseta de Palo Blanco
En esta ocasión, voy a escribir con puras vaguedades, aunque tenga yo la certeza de que nos están leyendo en alguna parte del globo terráqueo, pues gracias a las redes virtuales, uno ya no sabe hasta dónde estas letras se las llevará el viento, sobre todo gracias al periodismo, que se aprovecha de toda la ciencia y la tecnología para extender como hierba. Y sobre todo porque el estado de Guerre
ro tiene a uno de los puertos que por excelencia así como el paso del tiempo con las administraciones que le han invertido poco o mucho para que se siga desarrollando, pues Acapulco ya es todo un emblema, un punto de atracción, un generador de divisas, y sobre todo es como otros sitios turísticos que al no conocerlo se conciben sueños, esperanzas, “divinizándolos”. Para poder llegar al puerto, se tiene una infraestructura carretera en buenas condiciones, aunque solamente a la altura del poblado de Mazatlán, se tiene una rehabilitación al estilo del mito de “Sísifo” que los deslaves de los cerros son la causa, ya sea en temporada de lluvias o porque se suscitó un temblor. Sin embargo, existen otros tramos carreteros de la Autopista del Sol, que ya ha sido denunciado en su oportunidad, empezando desde el municipio de Cuernavaca, Morelos entroncando con nuestra entidad. Y aquí viene lo interesante esta columna, que se está volviendo una perversa costumbre que cada vez que una organización social, llámese como se le llame desea expresar su inconformidad porque no está de acuerdo con alguna situación asociada a su objetivo o necesidad, toman como plan de acción hacer su protesta en la caseta de Palo Blanco, bloqueando parcial o totalmente y en minutos u horas la citada Autopista. Y digo que se está convirtiendo en una costumbre perversa o maligna debido a que al bloquear, ponen de condición a los automovilistas que les den dinero para que los dejen pasar, aunque “bajita la tenaza” te piden de 20 pesos en adelante. Y ordinariamente son estudiantes normalistas que se amparan en que “es dinero que recabamos para costear algunos gastos para nuestros estudios o viajes de estudio” siempre teniendo la bandera de la aparición con vida de los 43 estudiantes de la Normal “Raúl Isidro Burgos”. Incluso, con conocimiento de causa, puedo sostener que estos bloqueos, se han convertido en un “modus vivendi” de otros grupos de presuntos estudiantes, que solapados por quienes encabezan estos movimientos, dejan que saquen para sus gastos muy personales. No es casual que siempre que algunos normalistas, así como ocasionalmente un grupo de inconformes por otras razones, decidan tomar la caseta de Palo Blanco lo hagan como una medida de presión para que las autoridades respondan a sus exigencias, sin embargo es bien claro que han cometido abusos en contra de automovilistas a quienes les piden esa cuota, sabiendo que son solapados por sus dirigentes. Y ese dinero que aprovechan no es precisamente para aprovecharlos en sus estudios, sino propiamente para comprarse sus refrescos, cervezas y otros aperitivos, y estos son comentarios de gente de esta ciudad capital tanto como de otros estados, pues su molestia es que no pueden hacer nada porque ni los uniformados de la Policía Federal así como las corporaciones policiacas que se dan su rondín toman cartas en esos abusos. Espero que ojalá, con esta nueva forma de gobierno federal, nueva porque apenas va entrando a la gobernanza formal, se pueda exigir un alto a los abusos de estos presuntos normalistas pedinches, o se estarán fomentando otras formas de impunidad, con los peligros que esto entraña…SALUDOS: Pues nada, que ya saben los que me leen, me siguen o me echan porras, en vivo o de manera virtual, que esta columna tiene variados temas de interés, a veces general u otro particular, y en este sentido es que ahora saludo al dirigente del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Esteban Albarrán Mendoza, que tiene muchos retos para que ese instituto se mantenga a flote, tanto en la permanencia de su militancia, como una opción de ciudadanos y ciudadanas de entre otros partidos políticos. Y por el momento les paso unos datos, “leve liváis” que retomo del siguiente sitio de Internet:www.enciclopediagro.org/. A saber: Periodista y político. Nació en Tlalchapa el 30 de junio de 1968. Hijo de Jorge Albarrán Jaramillo, profesor, periodista y político, y de Ninfa Mendoza Barrera, profesora. Casó con Erika Castelá Ortega, con quien procreó dos hijos. Realizó sus estudios de primaria, secundaria, bachillerato y licenciatura en la Ciudad de México, D. F. Obtuvo la Licenciatura en Ciencias Políticas y Administración Pública en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG); en 2000 cursó un diplomado en Ciencia Política en la Universidad Complutense de Madrid, España; en 2007 asistió como diputado local a un encuentro de empresas israelíes celebrado en Tel Aviv, Israel, y en 2008 a un Seminario Práctico de Elecciones celebrado en Madrid, España. En cuanto a su actividad periodística, destaca su gestión en 2000 como subdirector del periódico Diario 21 de Iguala y de 2000 a 2005, como comentarista político del noticiario “Con valor y con verdad” de Radio Fórmula y Tele Fórmula, ambas de cobertura nacional. Lo anterior, es un breve dato del actual dirigente priísta en el estado de Guerrero, aunque seguramente tiene otras prendas para presumir, pero sobre todo para saber quién está en esa responsabilidad partidista. (Comentarios y una cuota antes de que la pague en la caseta de Palo Blanco: dacnificados@outlook.es).

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