SEGUNDA PRINCIPAL DE PRIMERA PLANA

Mujeres manejan transporte
público  en la Capital, aquí

Juan Manuel Molina.--Bianca es conductora del servicio público en Chilpancingo desde hace tres años. Solo cuenta con estudios de educación secundaria y es una de las pocas mujeres que realiza un “trabajo de hombres”.

Son las 15:21 horas, cuando de su frente brotan unas cuantas gotas de sudor que en caída libre alcanzan su cuello e impactan con su camisa blanca, la habitual que usan los choferes. Por su buen trato y calidez, los usuarios del transporte público la felicitan.
Otros se rehúsan a subir, haciendo uso de la ignorancia, porque ¿quién no ha escuchado la frase “mujer al volante peligro constante”?. Su domingo son 18 circuitos, que realiza desde las seis de la mañana, hasta las 21 horas.
En el transcurso del día, su mejor compañía es una botella de agua, y un autoestéreo con música. En su primera cita de trabajo, quien después la contrataría, le preguntó si en verdad el trabajo era para ella o para su mari

do.
Tres años después, no se arrepiente de manejar para aportar ingresos a la familia. Va al volante ligeramente maquillada, con esmalte en las uñas de las manos y los pies.
Un cubre volante con la imagen de Jesucristo y un llavero de la Virgen de Guadalupe. Con seguridad, señala que el trabajo que realiza no es exclusivamente para hombres, sino también para mujeres, que arriesgan para ganar.
Aun piensa en continuar sus estudios en el nivel medio superior, por lo menos en la preparatoria, aunque ya no quiere ser educadora como lo soñó en la adolescencia, aunque esto no será hoy.(bajopalabra.com.mx).