lunes, 15 de abril de 2019

POLICRÓNICA

Videodesmantelado…El Ayuntamiento de Chilpancingo contaba con su Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo (C-4), actualmente  se encuentra desmantelado, únicamente están los postes con pedazos de videocámaras en calles y avenidas, por ello la Policía Preventiva no actúa con oportunidad ante los hechos violentos que hasta se registran en sus puertas del cuartel.

Por allá, en el 2002-2005, el Ayuntamiento de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, por vez primera tenía  su propio Centro de Comando, Control, Comunicaciones y Cómputo (C-4), pero a la fecha se desconoce oficialmente si está operando o está desmantelado. Sin embargo nuestro equipo de investigaciones especiales, se dio a la tarea de indagar de la existencia del C-4 y se encontró que ya está desmantelado, su oficina estaba dentro del cuartel de la Policía Municipal  de donde se monitoreaba la vida cotidiana  de Chilpancingo, capital del estado de Guerrero, ya que había videocámaras instaladas en avenidas y calles que eran de gran alcance y con una alta resolución que desde la preventiva se podía ver cualquier movimiento con mucha nitidez. De entrada quienes conocen de este sistema nos confirmaron que el Ayuntamiento de Chilpancingo, contaba con su C-4, hace más de 14 años, pero en la actualidad están desmanteladas las videocámaras, por ello que la Policía Preventiva, no actúa con rapidez, es más ni ellos mismos están seguros de la delincuencia.  Habría que recordar que desde las puertas del cuartel de la Policía Municipal se han registrado desaparición de personas como el ocurrido a finales del mes de diciembre del 2017, cuando levantaron a siete jóvenes, entre ellos Jorge Arturo Vázquez Campos y Marco Catalán Cabrera, quienes habían sido detenidos por la Policía Preventiva en las instalaciones de la Feria de San Mateo, Navidad y Año Nuevo y fueron llevados a la barandilla. En aquel momento se dijo que una persona, al parecer amigo de ambos, llegó a la barandilla para pedir su liberación, luego de pagar la multa correspondiente, el juez calificador en turno aprobó la liberación. Cuando salían de las instalaciones del cuartel,  habrían sido interceptados por un grupo armado y hasta la fecha nunca se supo quien cometió ese aberrante doble crimen. Por esos acontecimientos el 4 de enero del 2018, elementos del Ejército y de las policías federal y estatal irrumpieron el cuartel de la policía municipal y desarmaron a los uniformados. Los hechos ocurrieron minutos después de que el alcalde interino Jesús Tejeda Vargas reveló que los dos jóvenes hallados muertos fueron detenidos por policías municipales el pasado 30 de diciembre del 2017. Por casi seis meses  supuestamente los más de 300 policías preventivos de Chilpancingo, estuvieron “arraigados” por supuesta investigación de estar infiltrados con el crimen organizado, pero de todos ellos solamente un uniformado lo vincularon a proceso por la desaparición de esos jóvenes empresarios Jorge Arturo Campos y Marcos Catalán. Mediante comunicado de prensa del entonces Grupo de Coordinación Guerrero, había dado a conocer la tarde del 23 de junio del 2018 de que volvían a las calles de Chilpancingo los policías, pero sin que se precisara sobre las investigaciones que realizaba la Fiscalía General del estado y hasta el día de hoy tampoco se conoce. Ahora se repite la historia en la entrada y salida del cuartel de la Policía Municipal de Chilpancingo, el sábado 13 de abril cerca de las 18:15 horas,  cuando un hombre salía de sus instalaciones, tras haber cumplido 24 horas  de arrestado en la barandilla, fue interceptado y asesinado a balazos por unos hombres armados, en la que los uniformados en lugar de enfrentar a los delincuentes, corrieron a esconderse. Si no hay seguridad ni en las propias entradas y salidas del cuartel de la Policía Municipal de Chilpancingo, definitivamente los habitantes de la capital están condenados a vivir en la inseguridad pública y más ahora que se sabe que no opera el sistema de videovigilancia. Nuestro equipo de investigaciones especiales, nos reporta que en Chilpancingo, hay 74 cámaras de video vigilancia de las cuales 14 pertenecen al Ayuntamiento y no funcionan desde hace más 14 años. Las 60 videocámaras restantes pertenecen al gobierno del estado, pero también se desconoce en qué condiciones físicas están. Lo que significa que el Ayuntamiento de Chilpancingo, quien sabe desde cuando ya no opera ese C-4, hasta donde sabemos, estaba con cierta normalidad cuando todavía era Dirección, ahora Secretaría de Seguridad Pública en trienio 2002-2005.Recordamos perfectamente que en uno de sus últimos periodos como jefe de Policía Municipal, Erit Montúfar Mendoza por allá en el inicio del año 2002 todavía funcionaba óptimamente el C-4. Desde ese tiempo a la fecha, ya nunca más se conoció si se le dio mantenimiento o se renovó el equipo. Al parecer las autoridades municipales dejaron de invertir en este sistema, porque en ese tiempo comenzó el Gobierno del estado a fundar su propio C-4 y que hasta la fecha opera en Chilpancingo, Acapulco, Ixtapa-Zihuatanejo, Iguala de la Independencia, en tanto tiene estaciones repetidoras en otras  ciudades y regiones del estado. Para los ciudadanos que no saben que significa el C-4, es una herramienta computacional e infraestructura de comunicaciones, su objetivo principal es el de  mejorar la reacción entre elementos de seguridad y operadores de emergencias en situaciones de crisis con un tiempo de respuesta eficiente mediante la obtención de información oportuna. Cada C4 cuenta con al menos un Centro de Monitoreo integrado por un Videowall de pantallas o videocubos, Sistema de Videoconferencia, CCTV, Radiocomunicación, software de Colaboración y Visualización, todos diseñados para estar en operación 24/7. Adicional a esto cuentan con una Solución de Seguridad Física que incluye equipamiento de cámaras para videovigilancia, Control de Accesos, lectoras biométricas. En Chilpancingo, fue una de las primeras ciudades que contó con este sistema de apoyo a la seguridad pública, pero llegaron alcaldes que no invirtieron presupuesto del programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg). Los últimos secretarios de seguridad pública municipal, nunca hicieron nada por insistir a los presidentes municipales de la importancia que tenía mantener en servicio el C-4 en la capital del estado. El último hecho violento ocurrido en las puertas del cuartel de la Policía Municipal, ubicado por allá en el viejo libramiento el sábado por la tarde alrededor de las 18:15 horas y que ahora se sabe que respondía al nombre de Alejandro González, quien había sido detenido el viernes por la Policía por el robo de una ferretería en el Centro de Chilpancingo, y supuestamente los locatarios lo identificaron como asaltante en la zona, sin embargo los afectados se negaron a realizar las denuncias. Por tal motivo el detenido únicamente pagó una fianza por faltas administrativas y salió libre de barandilla durante la tarde del sábado. El actual  secretario de Seguridad Pública de Chilpancingo, Edgar Caín Pérez Burciaga, dijo que el asesinato de un hombre afuera de las instalaciones de esa dependencia los pone en alerta. Lo más grave es que sus declaraciones como de cualquier parroquiana, y no como jefe policiaco al decir que lamentaba “el evento triste” que los hace doblegar esfuerzos y abocarse más a la prevención. Argumentó que los policías municipales al darse cuenta del ataque no la repelieron por respeto a la vida de las personas que estaban en el lugar, pues había locales comerciales abiertos. “Se privilegió la vida de los ciudadanos que estaban ahí”. La verdad que  es lamentable leer este tipo de declaraciones del jefe policiaco, en la que no hay ningún compromiso con la sociedad, lo más que anticipa es que parte de los 30 millones de pesos para este año se contarán del programa de Fortalecimiento para la Seguridad (Fortaseg) se invertirán en la instalación de entre 24 y 30 postes de cámaras de videovigilancia, lo cual será una herramienta más de prevención. En verdad que no convencen en nada, por ello es que el Cabildo plural del Ayuntamiento de Chilpancingo,  están obligados a llamar a cuentas al jefe policiaco, al tratar de minimizar los hechos. El crimen ocurrido en el punto conocido como la “pluma” lo que debe alertar no es a los policías como lo refiere Pérez Burciaga, porque ellos saben con qué gente se juntan, sino que deben ser los ciudadanos en que no deben confiar en nada en los más de 129 uniformados de la preventiva presuntamente “certificados”. El crimen del ciudadano debe ser investigado y por supuesto por segunda ocasión a los policías preventivos, tienen mucho que ver con los hechos. Sale a relucir los cuestionamientos, de como sabían con precisión los delincuentes que se desplazaban en un vehículo de que  Alejandro González saldría de la barandilla exactamente a las 18:15 horas. Para realizar el asesinato con alevosía y ventaja, sin temor a equivocarnos, la información  salió desde dentro de la corporación policiaca hacia los victimarios al señalar la hora, el tipo de ropa y todas las características, para que los delincuentes no fallaran con su objetivo y sin pena ni gloria no  intervinieran los uniformados quienes obligadamente tenían que repeler la agresión, y realmente fuera con responsabilidad por la gente que caminaba por la zona y los negocios concurridos, entonces tenían la opción de radiar a sus compañeros de corporación que hacían rondín en las calles y avenidas y la otra es con el resto de los  que hacen vigilancia en Chilpancingo, entre ellos la policía militar que ya son parte de la Guardia Nacional. Se supone que existe una estrecha coordinación de las corporaciones de los tres niveles de Gobierno para ofrecer seguridad a los ciudadanos de la capital del estado. Además tienen a su disposición el servicio de emergencia 911, ni este tampoco funcionó. Esto precisamente para que no se dieran una confrontación armada entre los preventivos y los delincuentes en  donde ocurrieron los hechos sangrientos el sábado por la tarde. Ahora queda en el Cabildo plural en determinar qué hacer con el jefe policiaco y sus uniformados, porque hasta en las puertas de su cuartel los delincuentes levantan y matan a las personas con toda impunidad. ...Pimpón...Los dirigentes del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), en Guerrero, juegan al pimpón, con una diputación, que se las quitan y se las reponen, por impugnación de legisladores del Partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena). En verdad que no tienen seriedad estos políticos improvisados e irresponsables, están jugando con los votos del pueblo. Como es una diputación plurinominal, les viene un bledo a los del Verde Ecologista, porque no tienen compromiso de nada ni con nadie, pareciera que les importa un cacahuate el sufragio popular. Para meterlos en orden a los verdes de Guerrero, ahora la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) confirmó la sentencia de la Sala Regional que dejó sin efecto la diputación de Juan Manuel Santamaría Ramírez y la cedió a Yatziri Jiménez García, sin embargo, la suplente que había solicitado licencia, Eunice Monzón García, solicitó su reincorporación. En sesión este fin de semana, la Sala Superior resolvió que no existía la razón a Santamaría Ramírez ni al PVEM por lo que los juicios de reconsideración 60 y 61 eran inviables; solamente modificó la sentencia impugnada, en cuanto a la vinculación que se hizo al Congreso para que implemente medidas de no repetición. Con lo anterior en la curul permanecería Yatziri Jiménez García, quien ha sido respaldada por la bancada de Morena, sin embargo, mediante un documento fechado el 12 de abril dirigido a la presidenta de la Mesa Directiva Verónica Muñoz Parra, la diputada suplente Eunice Monzón solicitó dejar sin efecto la licencia que se le concedió el 16 de enero. “A partir de esta fecha se me tenga por reincorporada al cargo y funciones de diputada local, integrante del grupo parlamentario del Partido Verde Ecologista de México (…) con todos los derechos y obligaciones inherentes al cargo”, dice el escrito. Asi actúan los dirigentes del PVEM y sus diputados, utilizan la curul, como si fueran sus calzones. Es una franca afrenta para los electores, quienes desde ahora tendrá que razonar su voto para los comicios del 2021, porque ese partido no tiene seriedad, tuvieron que intervenir los de Morena, para que volvieran a tener su diputación de “regalo”, para ello impugnaron el hecho ante las autoridades del tribunal federal electoral, y les han dado la razón.

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