COLUMNA

DH-1-07-18
Tino Gatica
El fabuloso y santificado Día de las Madres en México

En muchos países del mundo se celebra el Día de las Madres, e incluso varían los meses, aunque se enfatiza en que mayoritariamente son en mayo, como en nuestro México,  sumados a Alemania, Australia, Austria, Bélgica, Brasil, Chile, China, Canadá, Colombia, Croacia, Cuba, Dinamarca, Ecuador, EE.UU., Estonia, Filipinas, Finlandia, Grecia, Holanda, Honduras, Italia, Japón, Letonia, Liechtenstein, Nueva Zelanda, Perú, Puerto Rico, República Checa, Suiza, Taiwan, Turquía, Ucra

nia, Uruguay , Venezuela y así sucesivamente, teniendo su origen antiquísimo bajo la festividadépoca de la antigüa Grecia cuando se rendían honores a Rea, madre de Zeus (Dios del cielo y el trueno), Poseidón (Dios del mar) y Hades (Dios del inframundo) hacia mediados del mes de marzo, teniendo todos estos datos en el omnipresente Internet. En donde agrego que se puede tener más información extensa, para los que sean buscadores o buscadoras de datos alternos. Y según mi apreciación, es que todo indica que la verdadera raíz de este festejo es por la Madre Tierra, resumen de todas las culturas, aunque con sus variantes, así como la Torre de Babel. Pero Bueno, en el caso de nuestro México, con toda esa carga idiosincrática, ocurre que el diez de mayo, de cada año, sin que se modifique en nadita esta fiesta, cada familia está viendo la manera de coordinarse en los preparativos para este colosal evento. Y las miles de historias se tejen de manera circular en el Día de las Madres, en donde al menos en nuestro país, nunca se le deja de santificar colocándola a la misma igualdad de una beata. Sin embargo, como se dice que madre solamente hay una, cuando no es de nosotros siempre se presta para miles de alegorías, tan de malas como de buenas. Es decir, no existe peor ofensa, casi como una sentencia de muerte, que te mienten la madre; o caso contrario, se puede ser tan bondadoso o generoso o abnegado o abnegada como una madre. No creo que se modifique en mucho esta idolatría, veneración u honra por el Día de la Madre, en todos los confines del mundo, pero en el caso de mi México, subayace un criterio de idolatrarla en su día, si acaso dos más, pero de ahí en adelante se les olvida a sus hijos e hijas, a sus nietos  o nietas; lo mismo ocurre con los hijos de sus hijos e hijas, porque a la madre-abuela-suegra-nieta (cuando tienen esta “dicha”), pues se fastidian rápido de ella. Estoy de acuerdo en que este festejo tiene su lado emotivo, sentimental e incluso de integración familiar, de lo que me congratulo pues formo parte de este rito anual, aunque en otros aspectos también me gusta dejar en claro que se han dado diversas maneras de denigrarla, de deshonrar su memoria o bien cometiendo delitos en sun ombre. Y para no verme demasiado amargado, deseo de todo corazón que quienes tienen a su madrecita (dicho con mucho cariño y respeto) en verdad la festejen como se debe, dándole toda esa atención que la haga sentirse positive en toda su plenitud. Para los que en diversas circunstancias ya no está físicamente o alejada de su entorno, se le puede “acercar” por medio de los recuerdos, por una llamada telefónica o por medio de una oración. (Comentarios: dacnificados@outlook.es).