jueves, 19 de septiembre de 2019

COLUMNA

Sin Concesiones
Armando Patrón
La educación en las escuelas secundarias Guerrero poco le importa a las autoridades, está podrida. Los maestros, principalmente de esas escuelas no se presentan a trabajar, falsifican las recetas médicas, pagan su cuota al supervisor y al director de la escuela, para que no se les realicen descuentos.
Obligan a los alumnos a dar cooperaciones sin que se informe que destino tiene el dinero, se roban el dinero de las cooperativas, tienen negocios dentro de las escuela, les venden el unifor
me, y tratan de robarle el dinero lo más que se pueda.
La educación está secuestrada por el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, reducto de trácalas y vividores, que sólo se dedican a crear pequeñas mafias para poder robarle a la gente, y lo mismo está pasando en el Alma Mater.
Un caso claro, es lo que está pasando en la Escuela Secundaria Técnica número 81, que es manejada por el Secretario de Organización del SNTE, Joaquín Domínguez Bautista, quien diversas versiones  protege al acosador sexual y representante sindical de esa institución Carlos Agustín Rodríguez Vázquez.
Estos dos sujetos, son los que se apropian del dinero de las cooperaciones, son los que protegen a los maestros que no se presentan a laborar, los que obligan a los alumnos a desempeñas labores de intendencia.
Por eso resulta difícil creer que un sátrapa como Joaquín Domínguez Bautista, pretenda ser dirigente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, cuando se dice que protege a ladrones y pervertidos.
Joaquín Domínguez Bautista es quien presuntamente opera la venta de libros, es quien protege a toda la caterva de corruptos, ladrones y explotadores sexuales.

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