COLUMNA

Carpeta Política
Tino Gatica

No se cumplieron expectativas en este agonizante año 2019 en México
En la Internet, usé una pregunta muy lógica: ¿Qué hubo de avances en este año 2019? Y la respuesta: Nada. Y es que aunque en esta administración distinta, de una cuarta transformación, según quienes consideran que son parte de este “pueblo feliz, feliz, feliz”, no ha habido mayores avances en desarrollo en términos generales. La respuesta, quizá a modo, para que sean felices los  super optimistas, es que se está sacudiendo la corrupción, aunque a la impunidad ya no lo toca

n. Todo lo que es pasado es horrible para quienes comulgan con esta cuarta transformación, la escribo así, en minúsculas, aunque estoy violentando una norma ortográfica. Ni modo. Y ciertamente no estamos en un retroceso, pero sí nos encontramos propiamente en un estancamiento en nuestro desarrollo como país. Y dale otra vez con que esto se debe al pasado. Esa cantaleta espero no sea la misma para el año 2020 que se aproxima. De lo contrario, habrá un rechazo más abierto, con esa desilusión en las expresiones. En lo personal espero que no sea así, sin embargo, mis escenarios que he planteado con unas amistades, en charlas informales, han tenido acierto. Cuando uno de los temas que pueden apuntalar la económía y por ende el desarrollo corres al Tratado de Libre Comercio (TLCAN), que en consecuencia es el Tratado de Libre Comercio para América del Norte (México-Estados Unidos y Canadá), ahora pomposamente denominado T-MEC es decir Tratado México-Estados Unidos y Canadá, no es más que la ratificación del primer acuerdo trilateral. Y quienes no tienen un poquito de memoria retentiva, incluyendo al presidente de México, lo festinan como si se hubiera logrado una hazaña, digna de ser incluida en algún libro de prodigios. Es que el desarrollo de un país, se traduce en su situación económica que va “junto con pegado” a la financiera. Quizá el aspecto inmaterial suele ser tomado como un aspecto primigenio, pero no se puede medir, tasar, evaluar, cifrar (de cifras). Lo peor es que como en esta nueva administración, se le apuesta a la ignorancia, a la desinformación e incluso a la no indagación (este último, requisito del periodismo a secas) el gobierno federal confía en que la firma (que debió ser la ratificación) entre los tres países sea para el bien de México. Sin embargo, como ya se le tiene puesta la bota en el cuello al gobierno mexicano, de parte de Estados Unidos, seguramente por marzo ya tendremos malas noticias de qué tanto tuvo qué ceder o lo cedieron, en cuanto corresponde a beneficios, ganancias y también derechos laborales. El apoyo con becas a estudiantes y a personas que no tienen empleo así como pensiones a personas de la Tercera Edad es un acierto mínimo para la grandeza que es México, pues muchos otros rubros se quedaron estancados, modificados e incluso borrados, por lo que no se cumplieron dichas expectativas en materia de seguridad, justicia, apoyo al campo, salud, de igual manera creación de empleos. Para bien pero sobre todo para mal, que en el asunto de los partidos políticos, ya el gobierno federal, está tomando su distancia sobre la conformación del partido que lo llevó al poder, debido a tantas situaciones cuestionables en la lucha por el poder. Y el letargo de los partidos políticos, de expresiones partidistas, de liderazgos sociales, de asociaciones civiles u organismos d la sociedad civil, serán acicates para quienes están en el poder. Esta (re)activación o surgimiento debe ser o propiamente será en relación a los actos de poder de los gobernantes en turno. Así es que, aunque falten todavía algunos días para despedir este año 2019, son buenas estas reflexiones, para que cada quien se ubique en su realidad, cada quien asuma que le ha ido bien, que tiene mucha certeza de que le fue bien y le irá mejor en esta nueva administración; así como quien difiera de esta nueva administración, que en lo personal, me sigue quedando a deber, supongo que no soy el único. ¿O sí? (Comentarios: dacnificados@outlook.es/FB:tinogatica).