jueves, 6 de febrero de 2020

COLUMNA

Carpeta Política
Tino Gatica
AMLO, cada conferencia mañanera más desangelado, desanimado y bastante colérico
He dicho que en lo personal, no me aguantaría estar en una conferencia mañanera, escuchar falsedades, diatribas, calificativos y confrontaciones con quienes no piensan igual que él, que el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador. Lo dije y lo sostengo, no niego ni una de mis vivencias de mi pasado, así fueran malas o peligrosas o que comprometieran mi integridad física, esto solamente como un ejemplo, en el caso personal; pues en el asunto de la política negar el pasado es negar situaciones que sacaron lo mejor de nosotros, ante la adversidad o bien ser amoro
sos con nuestros fraternos. Es el caso del presidente Andrés Manuel López Obrador, que se observa cansado, quizá frustrado hasta de lo que no puede atender, pero tiene todas las posibilidades. O no se siente a gusto de saber cómo le revientan los problemas, sin importancia (para él) como es la salud, las enfermedades de los mexicanos en infancia, una infancia que debe ser atendida, protegida, valorada, porque no son nuestro futuro sino nuestro presente. En esas conferencias, sabe manejar frases que en su oportunidad generaron empatía con ese pueblo que denota ignorancia, valemadrismo, e indiferencia. Ahora esas frases que fueron hasta graciosas, ahora no permiten ver a un verdadero presidente. O quizá es muy vulgar, que ése es su estilo, su personalidad, que en consecuencia será interesante saber si ese “pueblo bueno, pueblo sabio” lo sigue aguantando. Creo que no. Y en esas benditas (o malditas) redes digitales sociales se está observando un decaimiento de “seguidores” y “seguidoras” de AMLO. Y sale a relucir este personaje que por muy cansado que pueda considerarse es él mismo quien con su terquedad que en periodo fue virtud, ahora como presidente es cuestionable. Olvida que es presidente, y no un eterno candidato en campaña. No tiene porqué enojarse ante cuestionamientos de periodistas que no son a modo, ni están ahí porque son su “fuente”, sino porque desean saber, ver cómo piensa el presidente. Y sí, siento que se han llevado una desagradable sorpresa al verlo con sus discursos repetitivos, todo culpando al pasado, haciendo piruetas verbales leeeeeentas, que apenas pueden confirmar sus intenciones. Lo malo: un día dice una cosa, otra la descarta, y su gabinete, sus leales colaboradores y colaboradoras arreglando sus falsedades. No puede disgustarse AMLO cuando se le cuestiona, pues él propicia esa agenda. Y el periodista que está comprometido y obligado a cuestionar a quien representa el poder en turno no es enemigo, porque gracias a esta labor, se han logrado avances importantes en diversos ámbitos que forman parte de nuestro desarrollo. Un presidente sin muestra de tener obras y programas formales, institucionales está destinado al fracaso, porque no solamente tiene que estar administrando lo que ya se tiene o se dejó, no debemos olvidar que independiente de su pasado triunfo, los programas de otras administraciones dieron certeza de empezar con buen faro una nueva etapa gubernamental, pero ahora con él no hay certeza de nada. Bueno sí, pero todo en negro, negativo, todo oscuro… Saludos: Cuando uno empieza cada inicio de año, siempre se acuerda de las amistades que ha forjado, y agradezco al personal de la funeraria “Chilpancingo”, por las atenciones que ha tenido con este columnista, quien por diversas situaciones comprensibles ha buscado su apoyo. La funeraria “Chilpancingo” que se encuentra en la ciudad capital tiene una atención y servicio de calidad, pero enfáticamente sensible hacia los familiares o deudos de la persona finada. Dicha funeraria ha ganado bastante reconocimiento por el sensible servicio que ofrecen al pedir datos para saber cómo darle una cristiana sepultura a su ser querido. En el caso de la “Funeraria Chilpancingo” tiene un servicio especial de traslado de la persona fallecida en el interior del país, con unos requisitos fáciles de cumplir, pero que se les tienen que ofrecer físicamente en ese establecimiento, por muchas razones que he expuesto en esta columna, se les recomienda que acudan a pedir informes a este establecimiento “Funeraria Chilpancingo” que se ubica sobre la calle “Miguel Hidalgo” número 23 a pocos pasos del zócalo de esta misma ciudad capital. Esta clase de recomendaciones, siempre las hago con profundo respeto para mis semejantes, debido a que la muerte es la última etapa que uno quisiera saber, pero así es la vida. (Comentarios:dacnificados@outlook.es/FB:tino gatica).

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