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Los weyes de mi compadre

Apolinar Castrejón Marino
Pues con la epidemia del corona virus, algunas gente están verdaderamente apanicadas, mientras otras están tan tranquilas, quizá “porque tienen otra información”, y otras se mantienen resignadas, como dice el conocido refrán: “Que se haga la voluntad de Dios…en los bueyes de mi compadre”. 
Así que vamos a recordarles los casos de algunas pestes y plagas que han azotado a la humanidad. Empezaremos por la más conocida, la peste bubónica o peste negra, que en la Eda

d Media devastó todo el continente europeo.
La letalidad de la peste fue tan terrible, que ocasionó 75 mil muertes, y generó una despoblación que afectó económicamente a las grandes ciudades.
Vale aclarar que la peste es una enfermedad infectocontagiosa que afecta tanto a animales como a humanos, provocando la muerte del organismo afectado si no se aplica el tratamiento antibiótico adecuado.
La peste bubónica es una de las enfermedades bacterianas más agresivas ocasionada por la bacteria Yersinia pestis, y se contagia por el contacto con moscas infectadas. Se le llamó bubónica por la inflamación de los ganglios linfáticos de la ingle, las axilas o el cuello, que alcanzaban el tamaño de un huevo de gallina.
Los síntomas incluían fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, fatiga y dolores musculares, por lo cual requería tratamiento hospitalario urgente con una fuerte dosis de antibióticos.
El cólera, es una epidemia de origen asiático que llegó a Europa en 1830 y causó 30 mil muertes en Londres en menos de dos décadas, hasta que el doctor John Snow descubrió que todas ellas tenían en común el agua del pozo de Broad Street.
La llegada del cólera a España fue aún más devastadora en los dos brotes en 1843 y 1854. Luego se trasladó a Asia y África, donde ocasionó la muerte de más de la mitad de la población.
Cuando llegaron los españoles procedentes de Cuba, el 5 de marzo de 1520, al mando de Pánfilo de Narváez, las naves transportaban caballos, armas, y 900 soldados españoles, y también traían consigo numerosos gérmenes, virus y bacterias, de enfermedades a las que los nativos, no tenían capacidad de resistir, debido al aislamiento de América de las enfermedades de otras regiones.
La peor infección ocasionada por los españoles fue la viruela negra, que se expandió por todo el valle de México-Tenochtitlán ocasionando la muerte de 80 mil gentes, casi un tercio de la población.
En el octavo volumen de su Historia de las cosas de la Nueva España, Fray Bernandio de Sahagún describió con notoria claridad este terrible episodio.
“…dio una grande pestilencia de viruelas a todos los indios, en el mes que llamaban tepeilhuitl. Murieron muchos indios; tenían todo el cuerpo y toda la cara y todos los miembros tan llenos y lastimados de viruelas que no se podían menear de un lugar, ni volver de un lado a otro. Muchas murieron de hambre porque no había quien pudiese hacer comidas; los que escaparon de esta pestilencia quedaron con las caras ahoyadas y los ojos quebrados. Duro la fuerza desta pestilencia sesenta días, y después que fue aflojando en México, fue hacia Chalco.”
La malaria o paludismo mata más de medio millón de personas al año, principalmente en África. En España pasó de 400.000 casos y más de 1.300 muertes en 1943. En países de Sudamérica ocasionó la muerte de más de la mitad de la población. Gracias al DDT desapareció de Europa, donde era endémica en países como Grecia o Italia. Los gobiernos de Estados Unidos  México, craron la Comisión Nacional para la Erradicación del Paludismo (CNEP) con muy buenos resultados.
La fiebre amarilla, también conocida como Vómito Negro es una enfermedad viral aguda que apareció en Europa, acabando con un tercio de españoles.
La sífilis, es ocasionada por el Treponema pallidum, procedente de América, y se propagó por Europa tras el sitio de Nápoles en 1495, contagiada por los españoles conquistadores a las prostitutas italianas.  
La poliomielitis atacó sin distinción a pobres y ricos, y aunque no es mortal, dejaba graves secuelas invalidantes. El ébola atacó Zaire y Sudán en q976, ocasionando 60 mil muertes. El Cólera atacó Francia en el siglo XIX ocasionando 20 mil muertes.