𝙍𝙤𝙙𝙧𝙞𝙜𝙤 𝙑𝙚𝙧𝙖.CIUDAD DE MÉXICO.—La tarde de este jueves, el sacerdote Felipe Vélez Jiménez, párroco del templo de San Gerardo María Mayela, de Iguala, fue atacado a balazos en el punto conocido como Los Claveles, en el municipio de Chilapa, Guerrero.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que el ataque ocurrió alrededor de las 12:20 horas, cuando el sacerdote salía de Chilapa hacia Chilpancingo a bordo de una camioneta, y un grupo de hombres armados lo atacó a balazos.
Detalló que el religioso resultó herido a consecuencia de una bala que le impactó en el pómulo derecho. Fue trasladado herido a Chilpancingo, y su estado es delicado, pero estable, según los reportes médicos.
Por su parte, el Centro Católico Multimedial (CCM), institución eclesiástica que lleva las estadísticas de sacerdotes agredidos y asesinados, informó hoy que con el padre Vélez son ya seis los sacerdotes agredidos en lo que va de este sexenio.
Indica que, el 22 de diciembre de 2018, el sacerdote Eulogio Espinoza Nájera, vicario de la parroquia de la Resurrección del Señor, en Hermosillo, Sonora, fue herido con un arma de fuego por un individuo que entró de forma repentina en un salón-cocina de dicho templo, donde ocurrió la agresión.
En abril de 2019, el padre Ambrosio Arellano Espinoza, de 78 años de edad, perteneciente a la arquidiócesis de Puebla, fue víctima de un ataque y tortura, en un aparente robo. Fue hospitalizado debido a que presentaba quemaduras de segundo grado en pies y manos.
El 13 de diciembre de ese año, el sacerdote jesuita Raúl Cervera Milán fue emboscado y atacado a balazos por un grupo de desconocidos, en Huayacocotla, en la sierra norte del estado de Veracruz. El jesuita logró escapar de la emboscada y pedir ayuda a las autoridades.
El 8 de enero de 2020, el padre Roly Candelario Piña Camacho, fue secuestrado, herido con arma de fuego y abandonado a un costado de la carretera México-Puebla, a la altura del municipio poblano de Santa Rita Tlahuapan.
El 10 de julio de 2020, el sacerdote Osvaldo Aval, mientras celebraba una misa en el templo de Santiago Apóstol, en el municipio michoacano de Ario de Rosales, fue agredido físicamente por una persona que intempestivamente entró al recinto religioso.
Ahora el padre Vélez –originario de Taxco—se suma a la lista de sacerdotes agredidos, justo cuando la Iglesia está en una jornada de oración y reflexión para pedir por la paz en México, la cual se desarrolla a nivel nacional en los templos católicos y concluye el día último de este mes de julio.
Esta jornada de oración se emprendió a raíz del asesinato de dos sacerdotes jesuitas, ocurrido en junio pasado en la Sierra Tarahumara. (𝘱𝘳𝘰𝘤𝘦𝘴𝘰.𝘤𝘰𝘮.𝘮𝘹).
#𝗤𝘂é𝗱𝗮𝘁𝗲𝗘𝗻𝗖𝗮𝘀𝗮. 🏡 💙
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crónica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.