𝗟𝗼𝘀 𝘃𝗲𝗰𝗶𝗻𝗼𝘀

César González Guerrero.              

Nos referimos a un vecino o vecina cuando  existe  una cercana relación entre  una o más personas, ya sea como familia o simple conocidos.

Es una relación humana que regularmente  surge por azar del destino o de manera circunstancial, a veces por tiempo indefinido o en ocasiones de manera temporal.

Como sea, ser Vecinos es una oportunidad de convivir y compartir situaciones agradables o desagradables.                      

La geografía nos permite ubicarnos en espacios cortos o lejanos, de una comunidad, ciudad o país. Como sea, ser Vecinos implica una gran responsabilidad social.        

Por supuesto que, como en todo, hay Vecinos Buenos, regulares y malos. Depende mucho del carácter de la persona y de sus antecedentes.                         Desde luego que todos buscamos ser o tener buenos Vecinos. Creo nadie busca malos Vecinos.              Hay muchos ejemplos al respecto. Pero también hay algunos nada agradables.      

Recuerdo que en los años 1960, en mi tierra Copala, prácticamente nuestros vecinos eran familiares y amistades muy bien identificadas. Muy unidos, solidarios, generosos, respetuosos y cariñosos. En las buenas y en las malas situaciones.      

Hoy, después de 60 años, aún existen gratos recuerdos de inolvidables Vecinos y Vecinas como: Sostenes López (Ma Chota);  Hilaria Aparicio (Ma Yaya) y Nicolasa (Ma Nico);  Francisca Suastegui (Ma Panchita);  Aquilina Villalba (Ma Quilina) y Elodia Villalba (Ma Yoya); Angelita Flores (Ma Angelita); Sinfórosa Mora (Doña Sinfo); Victoria Castañeda (Ma Toya); Epifanía Pérez (Ma Guaña); Cornelia Ventura (Ma Cornelia); Consuelo López (Ma Pipicha); Tomása García (Ma Tomasa) y Clara García (Ma Clarita); Rosa Pérez (Ma Rosa); Beatriz Sánchez ( la Coronela); Cleotilde (Ma Cotin); Fe González (Ma Fecita); y algunos varones como Prisco González (Pa Prisco); Evangelista (Tío Banga); Maurilio García (Pa Guillo); Proculo Aparicio (Pa Proculo); Aniceto Figueroa (Don Cheto); y mi abuelo Gaudencio González (Pa Dencho).          

Solo por mencionar a las Vecinas y Vecinos de la cuadra que los tratamos todos los días y noches con mucho aprecio.            

Hoy, al recordar a estas nobles personas las honramos como Vecinas y Vecinos ejemplares, esperando que sus descendientes, con todo respeto, estén de acuerdo con este modesto  Reconocimiento y homenaje póstumo.

Ser Vecinos es parte de una cultura popular en algunas comunidades, pero en las ciudades se ha convertido en un problema producto de la modernidad y desarrollo de los pueblos, que se debe atender oportunamente, para una sana convivencia.

Tal vez sea necesario se promuevan actividades en donde la interacción evite confrontaciones y fomente la armonía que tanta falta hace en estos tiempos.

Ya veremos.

 #𝗤𝘂é𝗱𝗮𝘁𝗲𝗘𝗻𝗖𝗮𝘀𝗮. 🏡 💙