๐๐น๐ด๐ผ ๐ รก๐ ๐ค๐๐ฒ ๐ฃ๐ฎ๐น๐ฎ๐ฏ๐ฟ๐ฎ๐
๐๐ค๐ข๐๐ฃ๐ฉ๐ค ๐ฅ๐๐ง๐ ๐ก๐ ๐ง๐๐๐ก๐๐ญ๐รณ๐ฃ;
๐๐จ๐ฅ๐๐๐๐ค ๐ฅ๐๐ง๐ ๐๐ก ๐ง๐๐๐ฃ๐๐ช๐๐ฃ๐ฉ๐ง๐ค
“๐๐ณ๐ข๐ฃ๐ข๐ซ๐ข๐ณ ๐ฑ๐ฐ๐ณ ๐ญ๐ข ๐ค๐ฐ๐ฏ๐ค๐ฐ๐ณ๐ฅ๐ช๐ข, ๐ฆ๐ด ๐ง๐ถ๐ฏ๐ฅ๐ข๐ฎ๐ฆ๐ฏ๐ต๐ข๐ญ. ๐๐ถ๐ฆ ๐ด๐ฆ ๐ค๐ข๐ญ๐ญ๐ฆ๐ฏ ๐ญ๐ฐ๐ด ๐ข๐ณ๐ต๐ฆ๐ง๐ข๐ค๐ต๐ฐ๐ด ๐บ ๐ฅ๐ฆ๐ซ๐ฆ๐ฏ ๐ฅ๐ฆ ๐ค๐ข๐ถ๐ด๐ข๐ณ ๐ฅ๐ฆ๐ด๐ต๐ณ๐ถ๐ค๐ค๐ชรณ๐ฏ ๐บ ๐ฎ๐ถ๐ฆ๐ณ๐ต๐ฆ, ๐ฆ๐ด ๐ถ๐ฏ ๐ฃ๐ถ๐ฆ๐ฏ ๐ค๐ฐ๐ฎ๐ฑ๐ณ๐ฐ๐ฎ๐ช๐ด๐ฐ ๐ฑ๐ข๐ณ๐ข ๐ณ๐ฆ๐ค๐ฐ๐ฏ๐ด๐ต๐ณ๐ถ๐ช๐ณ ๐ค๐ฐ๐ฏ ๐ท๐ข๐ญ๐ฆ๐ฏ๐ตรญ๐ข ๐บ ๐ฅ๐ช๐ฑ๐ญ๐ฐ๐ฎ๐ข๐ค๐ช๐ข ๐ฆ๐ด๐ฑ๐ข๐ค๐ช๐ฐ๐ด ๐ฅ๐ฆ ๐ฏ๐ฆ๐จ๐ฐ๐ค๐ช๐ข๐ค๐ชรณ๐ฏ, ๐ฐ๐ณ๐ช๐ฆ๐ฏ๐ต๐ข๐ฅ๐ฐ๐ด ๐ข ๐ง๐ฐ๐ณ๐ฎ๐ข๐ณ ๐บ ๐ข ๐ค๐ฐ๐ฏ๐ง๐ฐ๐ณ๐ฎ๐ข๐ณ ๐ทรญ๐ฏ๐ค๐ถ๐ญ๐ฐ๐ด ๐ฅ๐ฆ ๐ถ๐ฏ๐ชรณ๐ฏ ๐บ ๐ฅ๐ฆ ๐ถ๐ฏ๐ช๐ฅ๐ข๐ฅ”.
=============================
Vรญctor CORCOBA HERRERO/ Escritor Espaรฑol
==============================
Hoy la humanidad, desmemoriada, inhumana y deshumanizada, debe cultivar como jamรกs la visiรณn del alma y someterse a la operaciรณn mรญstica del reencuentro. En consecuencia, hemos de hacer un alto en el camino, ya no sรณlo para adquirir aliento, sino tambiรฉn para tomar conciencia de lo que uno es y representa. Lรณgicamente, tampoco merecemos hundirnos cuando vemos muchas poblaciones, tan desfavorecidas como oprimidas, por la injusta pasividad de sus anรกlogos y por la brutalidad de la violencia. En este sentido, los signos presentes nos llaman a la actuaciรณn como signo de esperanza, que ha de comenzar por conciliar miradas para reevaluar las alianzas globales, con latidos del corazรณn, que son los que objetivamente, nos ponen alas.
Trabajar por la concordia, es fundamental. Que se callen los artefactos y dejen de causar destrucciรณn y muerte, es un buen compromiso para reconstruir con valentรญa y diplomacia espacios de negociaciรณn, orientados a formar y a conformar vรญnculos de uniรณn y de unidad. Los encontronazos no sirven para nada, sรณlo para generar divisiรณn y activar absurdos frentes. Lo suyo es tender la mano y extender el abrazo, ante la inestabilidad y la incertidumbre presente. Por desgracia, aรบn no hemos aprendido a reprendernos para compartir con los demรกs, hasta nuestro propio entusiasmo. Urge, por tanto, que se trabaje por un porvenir mรกs equitativo y fraterno. La desolaciรณn no puede gobernarnos, necesitamos recuperar la alegrรญa de vivir y la satisfacciรณn de desvivirnos por los demรกs.
En efecto, porque nos falla el alma y nos sobran armas, no podemos conformarnos con sobrevivir. Amoldรกndose al escenario actual y dejรกndose satisfacer รบnicamente por objetos materiales, nos corrompemos. Tenemos un espรญritu que requiere despertar cada dรญa y hacer generaciรณn. Cada latido es un sueรฑo mรกs, que nos invita a sentirnos cercanos, pues todo nos afecta a todos. Desde luego, a poco que nos adentremos en lo que nos rodea, veremos que los dramas del empobrecimiento estรกn ahรญ, en cualquier esquina, pueden ser nuestros vecinos. Resulta escandaloso que, en un mundo dotado de avances y recursos, sรณlo los disfruten algunos privilegiados. De hecho, a la hora de una actuaciรณn concreta; los excluidos, que casi siempre son vรญctimas no culpables, apenas reciben migajas.
Olvidamos que los bienes de la tierra son para el ser humano, no para destruirse unos a otros, sino para dar subsistencia sin exclusiones. Si en realidad queremos hermanarnos, esforcรฉmonos por remediar las causas que originan los calvarios indignos, tomemos esta santa semana como reflexiรณn, cancelemos las deudas injustas y saciemos a los hambrientos. Precisamente es esta comuniรณn plena de pulsaciones, la que nos humaniza y nos llena de felicidad, aunque estemos surcados por las lรกgrimas. Dejรฉmonos transportar por esa nueva vida que todos llevamos mar adentro, volvamos al reino de la poesรญa para injertarnos el verso de la pureza, viviremos entonces sin dobleces, con la libertad de servir y de no servirnos de nadie.
Sรณlo gracias a ese encuentro o reencuentro meditativo, lograremos ser rescatados de lo mundano. Tanto es asรญ, que llegamos a ser plenamente humanos cuando somos mรกs que hermanos, donantes a pulso abierto, sustentados bajo el aliento mรญstico del afecto, que indisoluble lo justifica con la compasiรณn, con una eterna novedad transmisora de luz y transformadora de bien. Ciertamente, con la vitamina del aguante todo se sobrelleva, es menester cultivarla, ponerse en espera para reponerse, esperando el instante precioso y preciso que aunados demandamos para ese cambio de actitud, que no requiere de una resistencia estoica al sufrimiento, sino que es fruto de un amor, que no es otro que el controlar nuestros instintos y refrenar las malas respuestas.
corcoba@telefonica.net
13 de abril de 2025.-
#๐๐น๐ช๐จ๐ช๐ณ๐ญ๐ฆ๐๐ญ๐ข๐ถ๐ฅ๐ช๐ข๐ค๐ถ๐ฎ๐ฑ๐ญ๐ข.
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crรณnica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.