Crónica de 50 años de un monasterio, leído hoy

𝙈𝙖𝙧𝙘𝙤 𝘼𝙣𝙩𝙤𝙣𝙞𝙤 𝙏𝙤𝙡𝙚𝙙𝙤 𝙅𝙖𝙞𝙢𝙚𝙨.TAXCO DE ALARCON, GRO., 21 de mayo de 2025.—La Madre Soco escribió su crónica de hace 50 años de  como se formó lo que ahora se conoce como Monasterio “Betania de Jesús y María Inmaculada”, ubicado  en la comunidad de San Juan, municipio de Taxco de Alarcón, región norte de Guerrero.

La autora del escrito,  a{un vive, sigue estando activa entre las religiosas, esto luego de que terminó la casa de Cristiandad en el año de 1974 por el  señor Cura y Vicario foráneo, Pedro Iturralde Olea, párroco de Santa Prisca en Taxco, Guerrero, se dedicó junto al Obispo de ese tiempo Don Fidel Cortez Pérez, a buscar religiosas, habiendo recorrido 12 comunidades en la ciudad de México.

𝗧𝗲𝘅𝘁𝗼 í𝗻𝘁𝗲𝗴𝗿𝗼 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗰𝗿ó𝗻𝗶𝗰𝗮 𝗱𝗲 𝗵𝗮𝗰𝗲 𝟱𝟬 𝗮ñ𝗼𝘀 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗺𝗮𝗱𝗿𝗲 𝗦𝗼𝗰𝗼, 𝗳𝘂𝗻𝗱𝗮𝗱𝗼𝗿𝗮 𝘆 𝗽𝗿𝗶𝗺𝗲𝗿𝗮 𝗮𝗯𝗮𝗱𝗲𝘀𝗮 𝗱𝗲𝗹  𝗺𝗼𝗻𝗮𝘀𝘁𝗲𝗿𝗶𝗼 “𝗕𝗲𝘁𝗮𝗻𝗶𝗮 𝗱𝗲 𝗝𝗲𝘀ú𝘀 𝘆 𝗠𝗮𝗿í𝗮 𝗜𝗻𝗺𝗮𝗰𝘂𝗹𝗮𝗱𝗮”.

Muy buenas tardes hermanos. Un día como hoy hace 50 años llegan las primeras hermanas que dan inicio a un hermoso proyecto, escuchando la voz de nuestro Señor que las vuelve a llamar para dar vida a un nuevo Monasterio en esta llamada Diócesis.

Daremos lectura a una crónica de hace 50 años, escrita por una de nuestras madres fundadoras que aún está presente. La Madre Soco, fundadora y primera Abadesa del Monasterio.

Habiendo terminado la construcción de una casa de Cristiandad en el año de 1974, por el Sr. Cura y vicario foráneo, Don Pedro Iturralde Olea, párroco de Santa Prisca en Taxco, Gro., se dedicó junto con el excelentísimo señor don Fidel Cortez Pérez, actual Obispo de Chilapa, a buscar religiosas para la atención de dicha cas. Habiendo recorrido doce comunidades en la Ciudad de México, sin éxito por falta de personal. 

Por disposición divina conocieron a la Reverenda Madre Concepción Plancarte de la Orden de la Inmaculada Concepción, del Monasterio de tres Marías, Morelos, quien les informo que en el  Monasterio de la Purísima Concepción de San Miguel de Allende Guanajuato había posibilidad de conseguir  las  religiosas que buscaba. 

El 19 de mayo de 1975 a las 7:30 de la mañana llego el Sr. Cura don Pedro Iturralde Olea a nuestro Monasterio en San Miguel de Allende, con el firme propósito de conseguir la deseada fundación. 

Celebró la Eucaristía exhortándonos de tal manera a ser generosas que nos convenció a varias, ya que hasta ese momento solo se habían animado 3 hermanas de edad avanzada dándonos ejemplo de valentía y amor por extender la Orden. 

Ese mismo día acudió a solicitar los permisos requeridos ante el Excelentísimo Señor Don Victoriano Álvarez Tena, Obispo de Celaya. 

Obtenido el permiso, acordamos salir inmediatamente al día siguiente 20 de mayo a las 6.00 de la mañana, pero por la rapidez de la decisión y el corto tiempo para prepararnos salimos en el autobús de las 7, encontrando poco después el autobús de las 6 volcado y con la mayoría de pasajeros fallecidos. 

Vemos claramente la providencia amorosa de Dios y el amor de nuestra Inmaculada Madre que nos protegieron y permitieron llevar a cabo la deseada fundación. 

Llegamos a las 5 de la tarde, comimos en el Curato, posteriormente subimos a la Parroquia de Santa Prisca junto con nuestro padre fundador a dar gracias a Dios por haber llegado con bien. Finalmente nos trasladaron a Betania. 

Cabe destacar que con bastante miedo íbamos viendo cómos nos alejamos de la ciudad y llegar a Betania por pequeños caminos de terracería, solo y en total oscuridad, después de vivir en un monasterio precioso y con todo lo necesario llegamos llegamos sin nada, nuestras cositas llegarían después; si bien a una casa nueva, absolutamente vacía sin camas, ni cocina ni una cucharita siquiera. 

En los días siguientes fuimos consiguiendo con los vecinos de san Juan pequeños utensilios: ollitas, jarritos despostillados para ofrecer al menos una gelatinita al sr. Obispo que nos visitó esos días. 

La tía de nuestro padre fundador Mamá Romita con mucho cariño y ternura nos hace llegar cositas necesarias para la comida que preparamos en el piso en tres piedritas. 

Aún así estábamos felices sabiendo que esto es obra de Dios y que poco a poco con su ayuda iremos dando forma a nuestra comunidad y amado Monasterio “Betania de Jesús y María Inmaculada. 

El grupo completo de hermanas fundadoras: que aún viven Sor María del Socorro de Jesús Hostia, Sor Angélica del Divino Prisionero, Sor María Laura de nuestra Señora de Fátima. 

Sor Verónica de Jesús Crucificado que salió del monasterio a los pocos años de la fundación y en 1983 Fundo en Guadalajara el instituto de Misioneras del Inmaculado Corazón de María y de los pobres con 63 hermanas y en 2006 la rama de varones con 25 hermanos y 6 sacerdotes. 

Las fundadoras que ya están Con Dios: Sor Catalina del Corazón de María, Sor Juana de la Cruz, Sor Rosa María de Santa Teresita, Sor Gertrudis de la Santas Llagas. 

Les agradecemos de todo corazón por su atención y sean muy bienvenidos a esta hermosa celebración de acción de gracias.

#𝘌𝘹𝘪𝘨𝘪𝘳𝘭𝘦𝘊𝘭𝘢𝘶𝘥𝘪𝘢𝘤𝘶𝘮𝘱𝘭𝘢.