๐๐ฎ ๐ฐ๐ต๐ฎ๐ฟ๐ฟ๐ฒ๐ฟรญ๐ฎ ๐บ๐ฒ๐ ๐ถ๐ฐ๐ฎ๐ป๐ฎ, ๐ ๐น๐ผ๐ ๐ฐ๐ต๐ฎ๐ฟ๐ฟ๐ผ๐ ๐ฑ๐ฒ ๐๐ผ๐ฝ๐ฎ๐น๐ฎ
Cรฉsar Gonzรกlez Guerrero.
En esta ocasiรณn, y en el marco de la celebraciรณn de las fiestas patrias, deseo agradecer a mi estimado amigo y maestro Isaรญas Alanรญs el obsequio de una obra escrita por รฉl, con la participaciรณn del tambiรฉn amigo Tulio Pรฉrez Calvo, titulada La Charrerรญa en Chilpancingo.
Sin duda, un documento que bien vale la pena deleitarse con una amena lectura, y que deberรญa formar parte de las bibliotecas del estado de Guerrero.
Aprecio mucho el detalle del distinguido maestro Isaรญas Alanรญs. A ambos les reitero mi reconocimiento por difundir una de las actividades mรกs importantes y antiguas en Mรฉxico.
Como bien lo mencionan en el texto de referencia, la llegada de los caballos, a la Nueva Espaรฑa, fue por el mar, y fueron los espaรฑoles quienes se encargaron de ello, como la historia lo ha registrado, con la conquista de Mรฉxico en el aรฑo 1521.
A partir de ese entonces, en todas las etapas de la historia de Mรฉxico, el caballo es, y ha sido, un factor elemental en el desarrollo econรณmico del paรญs, y por supuesto, parte fundamental de la cultura, la tradiciรณn y el arte mexicano. De ahรญ han surgido hombres y mujeres de a caballo, conocidos como Charros.
Quizรก por eso, en mi tierra Copala, al igual que la mayorรญa de los pueblos del รกrea rural, el caballo y el charro, son el binomio ejemplar de la convivencia humana con el animal.
Si bien es cierto que la charrerรญa es una actividad folklรณrica que identifica y une a los mexicanos, tambiรฉn es muy cierto que, a pesar del paso de los aรฑos, seguirรก siendo una de las mรกs ricas experiencias vividas por la juventud de los aรฑos recientes. Aparte del servicio terapรฉutico y de trabajo, montar a caballo serรก la caracterรญstica mรกs importante de la gente del campo y la ciudad.
Lamentablemente, en el รกrea urbana, va restringiendose el uso del caballo, y en las ciudades, con sus calles y avenidas modernas, solo en eventos especiales se disfruta de la charrerรญa.
Como en varios pueblos rurales, mi tierra Copala tuvo sus personajes histรณricos, legendarios, destacados en la monta de caballos charros, inolvidables por sus participaciones en las ferias y eventos cรญvicos, entre los que mencionamos a algunos que aรบn estรกn en la memoria, de la รฉpoca de los 60s y 70s, en virtud de sus habilidades en esta noble y digna actividad.
En este contexto, y esperando su comprensiรณn por si, involuntariamente, se omite alguien: Mauro Guerrero Morales y sus hijos Francisco, Antonio, Jesรบs y Adolfo Guerrero Gutiรฉrrez; Prisco Gonzรกlez Pacheco (conocido como el charrito de oro); Inรฉs Lorenzo Flores; Bulfrano Zรกrate Figueroa (Vanchera); Leonardo Fosado Gutiรฉrrez; Pompeyo Ventura Zambrano; Marcos Damiรกn Tejada; Agustรญn Gonzรกlez Pรฉrez; Celestino Gutiรฉrrez; los hermanos Ignacio y Gaudencio Guerrero Gutiรฉrrez; Lucio Rรญos Morales; Vicente Gonzรกlez Gutiรฉrrez; Sofio Gutiรฉrrez Polanco; Leonardo Ventura Flores; la familia Cรฉspedes Gonzรกlez con los hermanos Erasmo, Carlos (famoso Sampinga) y Juan, tambiรฉn Audon Cespedes รvila, Isidoro Cรฉspedes Vargas y Odilo Oliva Vargas; Erasto Morales Barreto; Hermenegildo Clemente Pรฉrez; etcรฉtera.
Unas de las mรกs esperadas exhibiciones de los charros de Copala fueron, precisamente, el desfile del 16 de septiembre, y la Feria regional del mes de mayo, siendo รฉsta รบltima la que permitรญa un mejor lucimiento de las demostraciones en el tradicional recorrido del toro de once, en el lazo, manganas, baile criollo de los caballos, y otras suertes charras dentro del "toril". Pero esa serรก otra historia.
Por hoy, va nuestro modesto homenaje y reconocimiento, a los hombres de a caballo que hicieron de nuestra infancia y adolescencia, disfrutar los mejores momentos de la vida en mi tierra.
A quienes aรบn viven deseamos lo mejor y a quienes han fallecido, va nuestro eterno agradecimiento por brindarnos y permitirnos compartir esos alegres tiempos.
¡¡Vivan los Charros de Copala!!
#๐๐ข๐ฎ๐ฐ๐ด๐๐ข๐ญ๐บ๐๐ข๐ฎ๐ฐ๐ด๐๐ช๐ณ๐๐ฆ๐ฐ๐ณ.
Comentarios
Publicar un comentario
Muchas gracias por leer La Crรณnica, Vespertino de Chilpancingo, Realice su comentario.